Adopta A Un Famoso «Logan Henderson» ||Terminada♥||

XXIII. "Golf y Raquetas."

M A Y:

—¿Qué deporte haces con frecuencia? —Pregunté de repente.

Aún seguíamos caminando para llegar a mi casa. La pregunta se me había ocurrido mientras recordaba que debía faltar a unas de mis clases de Judo el sábado.

Pensó un poco antes de responder.—Comúnmente practico básquetbol y cuando tengo la oportunidad de ir a la nieve, hago Snowbording.

—¿Eres bueno en golf? —Pregunté mirándolo de reojo.

—El mejor de los cuatro. —Dijo refiéndose a los chicos de la banda. Presumido de mierda.

—¿Te da los pies para ir a otro lugar? —Intenté recordar como llegar al campo de deportes.

—Uhm, ¿Ir dónde tu hermana y responder a todas sus preguntas o ir contigo? —Hizo una pausa.— ¿A dónde iremos? —Rió.

—Vamos a ir a que te destroce el culo en golf. —Sonreí y empecé a correr por el entusiasmo.

Se me habían acumulado las ganas de que ya sea mañana para ir a acosar a mi banda favorita e ir a demostrarle a Logan que era mejor en golf, mejoraba las cosas.

Estuvimos corriendo como diez minutos hasta que llegamos. Logan me estaba matando con la mirada en el minuto que llegamos al campo de deportes. Sarah, la chica que atendía el lugar, nos recibió con una sonrisa. No me inspiraba nada de confianza. Sabía que porque la tipa tenía que mantener la postura, no se lanzaba a Logan y se lo violaba frente de mí.

—Buenas tardes, queríamos ocupar una de los campos de golf. —Dije agarrando uno de los folletos que tenía en el mesón.

—¿Para dos personas? —Dijo tecleando unas cosas en el computador.

—Sí, por favor. —Intenté sonreírle.

La chica miraba a Logan mientras tecleaba las cosas, supuse que quería demostrar su habilidad para escribir en la computadora sin ver. La palabra "regalada" la tenía tatuada en la frente. Nos pasó una boleta.

—Son $15 —Su sonrisa se ensanchó más. Parecía el gato de Alicia en el País de las Maravillas. —¿Traen equipo o les paso unos?

—Los necesitamos. —Dijo Logan un poco incómodo. Ella asintió y fue a buscar los palos.

O sea, como no estar incómodo con una tipa que es peor que las fans. Rodé los ojos.

—Procura que sean del mismo número, por favor, de preferencia un hierro nueve para cada uno. —Grité para que me escuchara. Luego de unos minutos nos pasó el bolso que traía los palos y las pelotas. Le pasé un billete de 20 dólares. —Quédate con el cambio, así te podrás comprar un dildo y no estarás cachondeándote con un chico de veintidos años. —Le guiñé el ojo, acomodé el bolso con los palos y me fui hacia el campo de golf.

Logan venía detrás mío con cara de asombro. Esto de que una chica de dieciocho años, ponga en lugar a una tipa de aproximadamente treinta años, no se ve todo los días.

—¿Qué fue exactamente lo que pasó allá? —Preguntó, llegando a mi lado. Tenía el ceño fruncido.

—Te estaba salvando de una próxima violación. —Dije mientras ponía una mano en mi pecho. Le salvo la vida y se enoja. ¿Quién lo entiende? —De nada, por cierto.

—No, eso no fue lo que pasó. —Dijo, negando con la cabeza. —Eso acaba de ser un show de celos.

—¿Show de celos? —Reí. —¿Crees que tenía celos de una frustrada sexual?—Alcé las cejas. —, te estaba salvando el pellejo, amigo. Si quieres te devuelves y la complaces. —Empecé a caminar nuevamente hacia dónde quería estar.