Una semana de locura

¿Digo o no digo?

Abro los ojos, mi cuerpo se siente tan pesado que apenas y puedo moverlo

Me siento en la cama con esfuerzo y me doy cuenta que estoy en el hotel de Kioto pero mi hermano no esta

Me levanto de la cama y busco la daga, la encontré en una silla al lado de mi ropa, ahí me di cuenta que tenia una ropa diferente

¿Quién me cambio?

Camino hasta la daga y la cojo con cuidado, salgo de la habitación y me dirijo hacia la de Sandra

Al llegar golpeo y a los 5 segundos me abre...yasha

-¿yasha?-dije sorprendida y confundida

-kag...-dice abrazándome como si se le fuera la vida en ello

-ehhh...-la verdad ya no se como tratarlo aparte de que tengo mucha jaqueca como para pensar en algo- y ¿Sandra?

Me miró confundido

-adentro-me dice extrañado

-mmm-dije y lo esquive y al entrar vi a mi hermano, se me fueron todos los temores-¡sota!-dije aliviada y corriendo hacia él para abrazarlo con todas mis fuerzas

-hermana...-dice sota sorprendido y confundido-me...falt...a a...i.i.i...re

-lo siento-digo soltándolo

-¿Por qué lloras?-me dice confundido

-¿Qué?-digo limpiándome las mejillas y empecé a reír bajito-creo, que del alivio

-¿alivio?-me dice maru

-¿maru?-miro a su derecha y están Sandra, roku y Kevin-¿Sandra? ¿Roku? ¿Kevin?

-si, somos nosotros-me dice Sandra con una sonrisa

-¿están todos bien?-les pregunto preocupada

-si por bien te refieres a físicamente pues si-me dice roku

Suspire de alivio

-¿Por qué llorabas kagome?-me pregunto Kevin

-es que...-me puse nerviosa- temí por la vida de mi hermano-susurre

-¿Por qué?-me dice yasha

-estaba con nosotros sabes que no correría ningún riesgo-me dice Sandra frunciendo el ceño

-si...pero si naraku esta aquí mi hermano corre peligro-digo por lo bajo

-¿naraku esta aquí?-me pregunta yasha sorprendido

-digamos que si o al menos eso me dijo tasha-dije pensando en si podía haberme engañado...la verdad no seria extraño

-pues dile a amigo orejas de perro-me dice sota sonriendo- sé que él nos salvara-me dice con sus ojitos brillando

-veras sota las cosas con él no son sencillas y...-me empecé a rascar la cabeza nerviosa

¿Cómo le dices a tu hermano que tienes problemas con alguien del pasado?

-¿otra vez se pelearon?-dice con resignación recostándose en el suelo- ustedes dos no tiene ¡remedio!

-¡oye!-le digo ofendida- no es mi culpa que él sea un tonto, estúpido, terco que no puede pensar en algo mas que ramen-le dije molesta cruzándome de brazos

-y tu eres muy terca y obstinada con él-me regaña mi hermano

-¿terca y obstinada?-le exclamo molesta- pues discúlpame por intentar inculcarle algo de civilizado a in....-me mordí la lengua con fuerza-¡AUUU!!!!!!-exclame cuando me saque un poco de sangre