Ojos de cordero y sonrisa de lobo (Meanie)

Proyecto 3 cumplido

Wonwoo abrió lentamente sus ojos, sintiendo la increíble sensación que le daba las sabanas de su complemento, y aunque nunca lo dejaba quedarse en su casa, aprovechó esa ocasión para hacerlo, sonrió un poco más, acomodándose mejor en el pecho del menor, cuando lo escuchó gemir por lo bajo. Levantó su cabeza viendo como el peligris mantenía sus ojos apretados y comenzaba a sudar, claramente teniendo una pesadilla

Acarició el dorso de su rostro, admirando los rasgos masculinos pero sin embargo para nada descuidados del menor, era precioso y sintiéndose más que orgulloso de tenerlo a su lado, dejó un suave beso en su frente, despertándolo de golpe

-buenos días- le dijo, mientras el otro lo observaba un poco exaltado

-buenos días bebé, perdón... tuve una pesadilla- le respondió atrayéndolo a su cuerpo

-¿hace mucho que estás despierto?- agregó, comenzando a acariciar los cabellos negros del mayor, Wonwoo solo negó reposando nuevamente su cabeza en el pecho de Mingyu. Siguieron así por un buen rato hasta que el más alto gruñó

-¿qué te olvidaste?- preguntó Wonwoo en un tono divertido, conociendo que cuando su complemento hacía aquello era porque de seguro algo olvidó

-debó ir a comprar la dichosa rana que nos piden para anatomía, fui la semana pasada pero no había, dijeron que posiblemente hoy llegarían- bufó

-mi padre ya me la trajo la semana pasada desde la casa de mi abuela jajaja es horrible, es toda viscosa y verde- rió el mayor –entonces ¿debo irme para que puedas hacer las compras?- preguntó siendo abrazado con más fuerza por Mingyu

-me encantaría que me acompañaras bebé, pero queda demasiado lejos, además... no has comido nada desde ayer a la tarde- le recordó

-cierto, mi celular se rompió ayer en la lluvia así que mis padres deben estar preocupados... volveré a casa y cuando estés desocupado llámame al teléfono de la casa, sí?- le sonrió un poco, entrelazando sus manos, adoptando una mirada de preocupación

-no me pasará nada, ya no pienses en eso- suspiró el peligris, acariciándole una mejilla

-sabes que a ti no puedo mentirte y necesito descargarme, Mingyu... tengo miedo, y cada día que pasa el miedo aumenta, ya fue Dokyeom y Jun, ¿y sí sigue alguien más de nuestro grupo? ¿Y sí es Seungcheol, Hansol, Tu o yo?- preguntó mientras sus ojos se llenaban de lágrimas –hyung... no sé qué está pasando aquí, pero no nos pasará nada... el loco que hace esto ya se debe haber cansado, ahora vendrás conmigo al baño, nos ducharemos, bajaremos a desayunar y te acompañaré a tu casa- le sonrió limpiándole las lágrimas

-¿cómo sabes eso?- preguntó

-una simple corazonada- se levantó, tirando del cuerpo desnudo de su complemento y lo adentró a la ducha mientras jugaban y Wonwoo lo golpeaba por hacer comentarios pervertidos contra él, una vez listos, Mingyu le pasó ropa seca y bajaron a desayunar, sorpresivamente el padre del peligris ya se disponía a salir a trabajar por lo cual tomaba con rapidez su café

-¿te dormiste otra vez?- preguntó su hijo al terminar de bajar las escaleras, su padre terminó de tragar la tostada cuando vio como los adolescentes seguían agarrados de las manos

-sí, pero veo que no fui el único que tuvo una noche ajetreada- rió el hombre, enrojeciendo a su hijo –PAPÁ!!! No me cuestes las cochinadas que haces con mi madre por favor- se quejó colocando agua caliente para preparar el desayuno

-jajaja perdón, perdón... pero buen trabajo hijo, perdónalo Wonwoo si fue algo salvaje, viene de familia- rió el hombre, amaba molestar a Mingyu con cosas pervertidas y sabía que el pelinegro era su debilidad