Capítulo 16

14 1 0
                                    

Habíamos pasado un buen momento juntos en mi automóvil, la cercanía de nuestros cuerpos era lo que nos mantenía unidos. El sentir sus latidos junto a los mios, ése aroma delicioso a flores que me brindaba su piel, su pelo, sentir que me he enamorado por completo, como nunca antes. Éste sentimiento de quererla y apreciarla vuelve como un huracán, ella desordena mi corazón, ella es todo lo que una vez deseaba, lo que alguna vez ansiaba tener.
Si no la hubiese conocido, sería el mismo aburrido vocalista pero sin la magia que te hace conducir hacia la cima, porque siento que el amor es nuestra gasolina que nos hace sentir completos para vivir con alegría y siento que ella y yo estamos viviendo éste sueño que supongo o quiero creer que no tiene final.
La llevo de regreso hacia donde vivía, no me permitió acercarme demasiado así que la dejé en una cierta distancia del edificio donde me indicaba.
Yo siento que confio en ella más que a nada, confio en lo que dice, siento que todo ésto es algo mágico.
Nos besamos antes de despedirnos, aquél fue como el primer beso, tan intrigante, tan dulce y apasionado. Aquellos labios suaves se movían en contra de los míos con demasiada delicadeza, sedosos, expertos y sin profundizar demasiado. Luego me doy cuenta que ella se aleja, saluda con su mano derecha, me envía un beso en el aire. Le sonrío de regreso, ésos labios provocan mi tentación más grande, son mi mayor deseo. Comienza su modelaje alejándose de mí, no pierdo cada detalle de sus hermosas curvas que me tienen perdido, siento que no me oculta nada, siento que ella es sólo mía y sé que el amor que nos tenemos es más grande que el océano, no puedo estar más feliz de tenerla.
Enciendo el auto, mi rostro de tristeza se presenta mientras la veo caminar en el espejo retrovisor. Sé que no puedo cambiar ésto, necesito concentrarme más en mi trabajo ya que la disquera nos han estado molestando sobre la fecha de nuestro álbum. No hemos estado mucho tiempo en el estudio, sólo supimos entrar y prácticamente tratar de inventar alguna clase de sonido que no resulte tan pesado.
Me dirijo hasta mi casa, hoy ha sido un día increíble, si es con ella al lado siempre lo es, siempre lo sería.
Suspiro con el pensamiento en el álbum, hoy trataré de escribir algo ya que justamente se acercan los meses  dónde ya tendríamos que tener todo listo.

-Holaaa!-
Saludo con ánimos  cuando entro a la casa, pero noto que no hay nadie y supongo que estarán en el patio trasero o en algún sitio.

-¡Bill!-

Miro hacia la voz que salía de un pasillo. Aquél chico me sorprende, siento que se han ido todos.

- Andreas! ¿A dónde están todos?-

Le pregunto, desde ya que no parecía saber nada.

-Tom se ha ido a pasear su mascota, los Gs a una tienda, no tardarán-

-Bien, ¿Te han dejado sólo?.
Le pregunto mientras lo miraba, sentía que estábamos sólos.

-No, estaba en la habitación, viendo una película.
Me dice, noto su voz, él está cansado, y creó que necesita una siesta.

-¿Quieres tomar algo?-
Le pregunto mientras vamos a la cocina por algo de café.

- Vamos. Así que ¿Alisha? -
Me codeó. Nombro a la mujer con quien estoy, espero que no diga nada, ya que no quisiera oír tonterías.

- Si me encanta, es la mujer más perfecta que jamás pude tener..-

Le digo, siento la ilusión dentro de mí, de que hay algo fuerte cada vez que nos encontramos, cada vez que la pienso..y digo su nombre.

- Hermano, a mi no me gusta ésa mujer para ti, es.. No me convence.-

Dice y aquello pareciese una copa romperse en el suelo, haciendose pedazos en el frío piso.

-Andreas, ella es perfecta, pronto estará con nosotros, la conocerás, verás que es hermosa.-

Le repito, sé que no debería dudar, llevamos mucho tiempo saliendo.

-Hermano, sé que ella te gusta, pero es normal y la quieres, pero ten cuidado Bill.-

Me dice como si fuera una amenaza, aquello sólo logra que le repita lo que me pasa.

-Andi.. Yo confio en ella, en todo lo que dice. No me hagas dudar de su amor.-

Le repito, mientras nuestros ojos se encuentran, después me desvía la vista.

-Esta bien, Bill, sólo es una advertencia.-

Habló como si aquello me frenara.
.....

Los días pasaban, todo iba perfecto, tanto con la banda como también en mi vida amorosa. Se acercaba la navidad la fecha especial.
Pero no todo era color de rosa. La disquera nos estaba presionando con el album y debíamos prestarle más atención a nuestro trabajo como músicos.
Ya tenía ocho canciones, por lo visto eran las mejores que había creado pensando en ella.
Una de ellas se trataba sobre amar a quién te ame de vuelta. Fue la primer canción, cuando la conocí.
Otra se trataba de Sentirlo todo. Aquello se trababa de nuestros encuentros, lo mucho que me encantaba tenerla conmigo, despertar a su lado, ser su hombre, el único de su vida.
Las demás no les veía el sentido ya que eran frases sobre la banda, sobre nuestro trabajo, salidas frecuentes a fiestas y entre otras.

Rojo CarmínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora