XII

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Desde hace unos días Andy, está algo extraño. Primero una llamada que era jodidamente secreta por qué se alejó de mí lo suficiente como para dejarme entender de qué no eran mis asunto y que por ningún motivo debía enterarme.


Me fastidiaba el secreto, pero no creo que tenga el derecho a preguntar. El hecho de que haya algo más entre nosotros, no me da autoridad sobre las cosas que hace. Es su vida personal



" pero él sí tiene el derecho de celarte de cuánto hombre hay no es lo mismo. Solo le estarás preguntando. Además. No es la primera llamada que recibe y te lo oculta. Haz algo"


Mi subconsciente no ayuda, la intriga me carcome, más sin embargo. No lo haré. Es su vida. Que haga lo que quiera.

Termine de vestirme. Cuanto extrañaba utilizar ropa de hombre! Por alguna extraña razón, al salir más seguido con Andy y que fuera público; me llevó a vestir como nunca lo había hecho. Ni siquiera las veces que fui modelo para una campaña me vestí como una chica. Siempre usaba los trajes y cosas de caballeros ajustados a mi talla, y ahora mismo lo que tenía en el pequeño armario eran faldas y vestidos; me quedaban fabulosas, pero no estaba siendo yo.

Solté un suspiro cargado de esperanza a que hoy fuera un día tranquilo y normal.

Baje a la planta inferior y lo vi ahí jugando con su mascota. Se veía tierno. Me escuchó bajar y volteo la cabeza como el exorcista.- A donde vas?


- Con las chicas a pasar la tarde.


- Y no estarán los niños esos?- preguntó tratando de restarle importancia, pero se le notaba lo cabreado que estaba.

- No. - le confirme con una media sonrisa-Te dije que estaré con las chicas.


- Como la vez pasada?- soltó una risita carente de humor. - Iré contigo.


- Andy no! - casi grite. - Ya habíamos quedado en algo. Si salgo con alguno de ellos no te lo voy a ocultar. Me iré con las chicas y ya. Tú no estarás y ellos tampoco.

Camino a toda prisa hacia mí y se me paro tan cerca que podía oler la nicotina reciente. No baje la guardia, mi pose reclamaba más autoridad.

Qué diablos le pasa a este idiota?


- Voy contigo. - ordenó y me negué.
-

En sus ojos se notaba un color más claro, eran casi grises. Eso reflejaba sus inseguridades. Maldito niño.

- Te preocupa ser el único hombre en mi vida. Le tienes miedo a Ashton es?

- No es eso. Te quiero proteger. - se escudó con una excusa que no servía en ninguna circunstancia.

- Sorpresa. Sabes muy bien que no necesito un hombre para vivir mucho menos para protegerme. . - bufé- Que no se te olvide que no me hacen falta cojones para ser más "macho". Se valerme por mí misma. Y si acaso en lo que único necesitaría un hombre es en el sexo. Y que crees? Para eso están las manos. - moví mis falanges en su rostro con una sonrisa llena de ironía.


Me estaba colmando su actitud de querer dominarme, o tal vez no lo hacía, pero estaba llegando a un punto conocido para él y sabe muy bien que no me gusta esa postura.



- Que te pasa Dey?- Preguntó bajando su postura de macho alfa dominante.


- Me jode que no confíes y me jode que quieras tener control de mi. - explique haciendo movimientos aleatorios con mis manos y dejando escapar un bufido forrado de frustración.


Still Into YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora