LETTERS

Capítulo 4

No pude dormir después de ese sueño, toda la noche la pase con miedo, con las piernas pegadas al pecho y con la mirada siempre hacia el bosque.

"Helena". Es la voz de Joseph. "Helena". Repite, ahora su voz se escucha más cerca. El sonido de los golpes en la puerta me hacen brincar, es Joseph.

"¿Puedo pasar?".

"Si". Digo sin pensar; me paro del suelo de donde me senté toda la noche.

"¿Vienes a desayunar?". No recuerdo la ultima vez que comí.

"M-hmm". Asiento, no se porque le respondo en esta manera, creo que hoy no tengo muchas ganas para irritar o molestarlos, no me siento bien.

Camino hacia la cocina donde Julie esta parada preparando el desayuno. "¿Panqueques?". Dice Julie algo extrañada por mi presencia tan pacifica en la mesa.

"Aja". Recargo mi frente en mis manos con la mesa de soporte. Se miran extrañados e incluso se notan algo preocupados.

"Parece que alguien esta de humor hoy". Julie dice feliz. Irónicamente todo lo contrario.

"¿Tienes planes para hoy?". Julie le pregunta a Joseph.

"Si, tengo unos clientes esperando en Denton".

"Eso esta lejos amor".

"Si, algo, pero trabajo es trabajo". Terminan su conversación y Joseph se para de la mesa.

"Helena, cariño, ¿no vas a comer más?". Niego con la cabeza.

"¿No?, ¿no te importa tu salud?". Julie me dice y Joseph se ríe. "No le importa nada". ¿Que quiere decir con eso?, quiero decir algo pero me siento mal y estoy muy cansada como para que me importe; en vez de contestar, me levanto y me dirijo a mi habitación, cierro con llave y me recuesto para por fin descansar.

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Cuando abro los ojos reviso mi reloj, 6:32.  ¿Qué?, dormí casi siete horas. Odio cuando eso pasa, siento que pierdo el día; al menos me siento mejor ahora. La vista la tengo en el techo, mis manos sobre mi abdomen y sin nada que hacer recuerdo las cartas, no, no y no, le reclamo a mi subconsciente, por más que este mal, quiero leerlas, aunque no deba. No, ellas solo plantaran preguntas en mi mente y además gracias a ellas no pude dormir.

Ignorando a la razón y fomentando mi masoquismo me dirijo hacia el suelo, busco la tabla floja y la aparto; por más que una parte de mi quisiera que ya no estén ahí, la otra parte estaba feliz de que estuvieran.

"Bien". Suspiro, aquí vamos. Tomo las cartas sintiendo alivio, al fin poder saciar esa ansiedad que me estaban causando.

22 de Octubre del 2009.

                           "Cassie".

Cassandra Styles es mi hermana, aunque ella este muerta siempre será mi hermana. Todo el mundo me culpa por la muerte de Cassie, pero creanme, nadie me culpa más por su muerte que yo.

Cassandra dejo de existir el 22 de abril del 2004; tenía 6 años.

Yo tenía 10 años, no sabía lo que hacia, no me justifico pero quiero que sepan la verdad. El día 21 de abril, Cassie y yo jugábamos a las escondidas; todo a esa edad es tan fácil, no nos importaba nada; para un niño de mi edad en ese entonces era tan simple dejar a su hermana pequeña escondida en el sótano, sola y encerrada, sin saber como salir de ahí; Cassandra esperó, esperó a que yo la encontrara, pero jamás pasó. Cassandra fue encontrada sin vida el día 22 de abril en la noche, después de confesarles a mis padres donde estaba, yo siempre lo supe.