Capítulo 2

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"Buenos días". Julie sonríe desde la puerta de la habitación; debí haberle puesto llave.No respondo.

"¿Vienes a desayunar?". ¿Ella cocinó?. "Lo preparó Joseph, te va a gustar". Claro, no podía haber sido ella. Tengo mucha hambre pero no me quiero levantar.

"Mmmm, déjame dormir". Me quejo.

"¿Oh enserio?". Dice sarcásticamente.

"Si, ahora vete". Levanto la sabana para esconder mi rostro en ella.

"Esta bien, como quieras, solo quería decirte que las cajas llegaron". ¿Qué?

Retiro las sabanas y las arrojo al suelo, me levanto y corro hacia la cocina, ahí están. ¿Ella lo hizo?.

"¿Tu les llamaste?". Miro a Julie mientras señalo las cajas.

"No, fue Joseph". Genial, Joseph, Joseph, Joseph, claro.

"Gra-cias". Le digo seca y molesta; es obvio que quiere que me agrade, pero no sucederá.

Busco entre las tres cajas cual contiene cosas mías y así llevarla a mi habitación. La encuentro y regreso a dejarla.

"¿No desayunarás?". Julie pregunta.

"No". Le informo mientras camino hacia mi habitación.

"Esa niña". Es lo ultimo que escucho de Julie y un 'ya madurará' de Joseph, ¿quien se cree ese idiota?, y no soy una niña, ya tengo diecisiete, y no soy inmadura. Me enoja pensar que tal vez tienen razón, que soy una niña, que diecisiete no es nada, pero Julie es incluso menos madura que yo; cruzo los brazos.

Dejo la caja en el suelo y siento como una brisa agita mi cabello, dirijo la mirada a la ventana frente a mi, esta abierta.

"Pero que...". Yo cerré esa ventana, yo le puse llave, estoy segura de ello. Me dirijo a la ventana extrañada  para poder cerrarla, cuando observo como mi suéter azul, que estaba en el suelo esta mañana, esta en la entrada al bosque, el camino de ayer; la sangre se me congela. Abro la ventana y camino hacia el bosque sin dejar de mirar por todos lados, parezco paranoica, pero tengo razón de estarlo, ¿o no?.Ya que estoy ahí, lo recojo y miro al frente.

"Que hermoso" susurro. Es realmente bello, tenia razón, con luz este lugar es bellísimo, quizás... Podría echarle un vistazo rápido, pero...tal vez no es lo correcto, aquí estaba mi suéter, no hay explicación lógica, no debería estar aquí. Me doy la media vuelta y doy un paso, pero me detengo; extrañamente algo de este bosque me atrae, volteo hacia este, lo miro por unos segundos, suspiro y me introduzco en el.

Camino a lo largo del sendero admirando cada parte de este, cómo el sol toca la punta de los arboles, creando un baño de sol debajo de este, las hojas en el suelo, todo se ve alegre, no como en el otro sendero... Detengo ese pensamiento peligroso, es mejor no pensar en ello. Al cabo de unos cinco minutos llego a lo que parece ser un claro, es hermoso, esta rodeado con arboles y arbustos con flores, en medio de este hay un gran roble, camino a el y lo observó, es imponente, lo toco. Todo aquí es muy tranquilo, podría venir aquí mas seguido, sonrío; podría ser mi punto, donde no este Julie, donde no este Joseph, donde no este el mundo; solo yo y el bosque.

Me siento en la tierra y me recargo sobre el y pienso, pienso en todo, mi pasado, mi futuro y en lo mucho que me aterra. Me encanta este lugar, quizás no duremos en el, pero quiero disfrutarlo por ahora. En el fondo se escucha un crujido, me levanto asustada; quizás fue un animal, estamos en un bosque, claro que hay animales, me río de mi misma. Creo que es hora de irme, realmente no se cuanto tiempo pase aquí, volteo hacia el roble para admirarlo por ultima vez el día de hoy, noto como esta lastimado de una parte, como cortado; me acerco a el y me doy cuenta de que no es una simple cortada, son iniciales; lo toco, 'H.S'.

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