Blanco

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Caminamos por el puente en dirección al hotel cuando Emily recibió una llamada, me aparte de ella mirando aquellas frases con optimismo dejando me pensativa...

No lo podía creer...yo... (Las lágrimas comenzaron a salir)

Flashback*

Estaba a unos pocos metros de él, tan cerca de atraparlo...

Estire mis brazos pero todo se oscureció.

Escuchaba como los gritos de la gente poco a poco desaparecían. Mis ojos seguían cerrados, me sentía sin aire, mis pies no alcanzaban el suelo y tenía los brazos pesados.

Muy lentamente y con miedo iba abriendo los ojos, podía ver el oscuro río... Y en mis brazos...

Una felicidad desconocida me invadió al ver que... ¡¡TENÍA AL MUCHACHO!! ¡¡LO HABÍA PODIDO ATRAPAR!!

Lo tenía agarrado con mis brazos debajo de sus hombros, comencé a llamarlo pero no respondía, de repente siento como mis pies se elevaban por el peso de él, trate de agarrarme con los pies de la barras verticales de la baranda pero no alcanzaba.

Con todas mis fuerzas gritaba ayuda pero no veía respuesta. En mi mente surgieron pensamientos como: ¿Debería soltarlo? ¡Pero no me atrevo!... no quiero morir... ¡¡¿Qué hago?!!

Mi corazón estaba muy agitado, escuchaba a la gente decir "¡¡alguien ayúdenla, se va a caer!!"  con ira e impotencia grite:

– ¡¡PUTA MIERDA!! ¡¡ ¿NO HAY ALGUIEN QUE ME PUEDA AYUDAR?!! ¡¡POR FAVOR!!

Los gritos se escuchaban más fuerte. Estaba a segundos de caerme junto con el chico... pensaba que era el final. Sentía tanto miedo que solo puede cerrar mis ojos y rogar por un milagro.

La tristeza, la ira, la impotencia todo se mezclaba y hacían que las lágrimas comenzaran a salir...

No sabía que pensar ni que hacer, de repente.. Unos brazos agarraron mis piernas haciéndolas bajar, enseguida abrí mis ojos y pude notar como dos personas se acercaban para ayudarme a socorrer al muchacho. Al estar por fin a salvo la gente siguió su camino, agradecí con gran felicidad a aquellas personas que nos socorrieron. Las cuales no tenían interés alguno de quedarse, después de ver que nos encontrábamos bien y de llamar a una ambulancia.

Apenas se fueron me senté en el suelo a descansar, sentía que mi corazón estaba a punto de salirse, mire al cielo y respire profundamente, cerré mis ojos mientras disfrutaba de la brisa... Escuche el sonido de una notificación de l celular y pensé "mamá", Sonreí al saber que podría seguir disfrutando los mensajes de ella. A lo lejos oí el sonido de una ambulancia, enseguida me levante y pude verla acompañada de una patrulla.

Voltee a ver como estaba muchacho, mis ojos se abrieron ante la sorpresa de ver que ya no se encontraba. Mire en todas las direcciones y vi como el corría por el puente, cuando me disponía a ir tras él, una mano me detuvo, gire y mire que se trataba de mi compañera de cuarto, Emily. Retire su mano de mí brazo y seguir al muchacho, mientras ella corriendo detrás de mí, preguntaba:

–¡¿Porque corres?!

Mi mente estaba bloqueada, mi cuerpo seguía su instinto.

Casi llegando al final del puente mire como se subía a una camioneta negra y esta arrancaba a gran velocidad cuando llegaba. Cansada y agotada, apoyando las manos en las rodillas pude observar la placa. Pocos minutos después Emily llego a mi lado, me agarro del brazo y me dijo:

– ¡Vamos! – no me opuse.

Al acercarnos a la ambulancia comenzaron a revisarme para que todo estuviera bien. Cuando terminaron y me disponía a irme, un joven oficial de aspecto atractivo, alto, musculoso, con el cabello y ojos color negro. Se interpuso en mi camino y dijo:

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