Capítulo 11: "Los Demonios No Lloran"

534 45 18
                                    

//Nero//

Los días pasaron llenos de felicidad.

El amor que nos teníamos era insuperable.

-Nero... -Una voz suave y familiar me trajo curiosidad. Lo único que podía ver a mi alrededor era un fondo blanco y sin vida.
Complicado y confundido miré hacia todas direcciones, pero para mi sorpresa, no había nada.

-Nero... -Volví a oír y me di la vuelta, esperando esta vez encontrarme con el dueño de esas palabras.
Mi sorpresa fue enorme cuando la vi desde lejos observándome.
Llevaba el cabello suelto y me miraba con sus hermosos ojos, pero esta vez ya no quería correr a abrazarla y tan solo me quedé asombrado.

- Kyrie... -Susurré por lo bajo y ella me respondió con una dulce sonrisa.

-No sabes cuán feliz me hace el hecho de que yo haya dejado de ser una causa de pena para ti. Estoy tan agradecida de que hayas encontrado a alguien más, que según lo que se, te hace feliz, más de lo que yo pude haber logrado, tan sólo cuídala. Adiós...- Esta se volvió a desvanecer, pero a diferencia de mi primer sueño, no corrí tras ella, no intenté traerla de vuelta a este mundo... Ya había entendido qué era lo mejor... Todo se basaba en la felicidad de los dos.

Desperté un tanto confundido y me sorprendí al sentir un abrazo, miré hacia mi lado y encontré a la albina junto a mí.

-¿Pasa algo Nero?- La miré sin saber qué decir y atiné a sonreír.

- No te preocupes, creo que tuve una pesadilla, pero no pasa nada...-La chica me miró un tanto perdida y me regaló una dulce sonrisa.

-Todavía es de noche tonto, deberías descansar más... Te amo.

Terminó por volver a recostarse en mi cama y yo la abracé con un cariño inmenso.

//_____//

-¿Dónde crees que se habrá metido Dante?- Miré a Nero con cierta preocupación.

-El viejo debe estar bien, de seguro con Lady quizás o tal vez Trish...-Se encogió de hombros- Quién sabe.

En ese mismo instante la puerta del despacho se abrió.

-Hablando del rey de Roma- Nero dijo irónicamente y ambos observamos a la pareja, se veían un tanto desaliñados.

-¿Pasó algo?- Pregunté con cierta curiosidad.

-No, nada, un encargo... -Lady se excusó y sonrío a Dante.

-Sí, encargos... -El mayor tomó a la pelinegra de la mano.- Si nos disculpan, tenemos cuentas que arreglar a solas. -Con rapidez y determinación se llevó a la chica a su habitación.

Observé cómo Nero se reía.

-Dios viejo... ¿no puedes aguantarte un poco?- Ante lo dicho por el albino solté una pequeña risa.

Ya eran las 9 de la noche, el viejo ya se había ido hace bastante.
Nero y yo estábamos sentados en el sofá.

Nos miramos unos segundos tratando de recordar cada facción de nuestros rostros.

-N-Nero...-Susurré un poco avergonzada al notar la cercanía de nuestros labios.

-¿Porque te pones así?... Ya nos hemos besado, acaso es que... -Cambió su tono de voz a uno poco más seductor y tomando mi rostro me besó de una manera distinta a la de antes, esta vez con mayor pasión.

Confundida no dude en corresponderle, él me tomó de la cintura acercándome a su cuerpo. Luego de unos segundos nuestros labios se separaron y el albino con cariño me tomó en brazos y caminó hasta su habitación.

I Make The Angel Scream And The Devil Cry (Devil May Cry-Nero y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora