Hoy justo por el festival no tenía porque ir al instituto y mi cita no era hasta la noche, que era en el momento que empezaba el festival.
Así que decidí tomarme la mañana para elegir lo que iba a llevar, ducharme y arreglar cuatro cosas por casa. Lo que menos quiero es que luego con las prisas salga todo mal.Estaba muy nerviosa y me sentía mas torpe de lo normal. Asi que perdi toda la mañana en arreglar todos mis estropicios, ¡Que horror! A este paso sería momento de ir y ni me habría arreglado.
Ya era por la tarde y directamente me centre en arreglarme y ya haría algo con lo demás lo primero es lo primero.
De pronto suena mi móvil.
No reconozco el número. Que raro yo no suelo dar mi número a desconocidos. Descuelgo por simple curiosidad.-Hola Emma soy Mike.- ¿Quando le había dado yo mi número?
-Oh hola. ¿Querias halgo?
-Bueno si mira, que si te apetecia que en vez de ir al festival mirasemos todo desde otro sitio más "intimo". - Me sorprendieron sus palabras sonaba como si estuviera intentado conterner la risa. No le preste demasiada atención. ¿Como podría decirle que no?
-Claro no hay problema ¿Debería prepararme de alguna manera especial? - Ya no sabia que esperarme siempre fue una caja de sorpresas para todo el mundo.
-No, no. Sólo lleva calzado comodo te hará falta.-Claro, perfecto. ¿Te puedo hacer una pregunta antes de nada? ¿Como has conseguido mi número?
Se queda en silencio por un par de segundos.
-Mmm... Se lo pedi a un amigo... Tuyo... - Se le notaba nervioso como si hubiera dicho algo que no debia.-¿Estás bien?
-¡Si! Si, estoy bien. Luego te vengo a recoger a tu casa ¡Adiós!
De pronto me cuelga y me tienta la posibilidad contarle todo a mi mejor amiga. Pero miro la hora y veo que ya he perdido demasiado tiempo pronto vendra y aún voy sin vestir.
Al final me pongo unas deportivas de marca que me había comprado hace poco, pero aun no había tenido tiempo de estrenar, unos vaqueros pitillos que se ajustan a mi figura y una camiseta que me compré solo para este día y me quedaba realmente bien.
Me arreglo el pelo, no me había fijado hasta ahora pero me había crecido bastante, me llegaba a la mitad de la espalda y era castaño algo oscuro y con ondulaciones. Siempre había sido un horror para peinarlo, pero aún asi decidí dejarmelo suelto siempre me habian dicho que me quedaba bastante bien así.
No suelo usar maquillaje pero por hoy haré una excepción y usaré un poco.
En su momento si no me hubiera llamado habría usado un vestido o algo mas femenino pero creo que sera mejor ir comoda, no se a donde me llevará y prefiero estar preparada por si acaso.Ya solo quedaba media hora para la cita preparo una bolsa con todo lo que opino que podria necesitar.
- A ver... El móvil, las llaves, me llevaré una coleta por si acaso, la cartera con dinero y... No creo que necesite nada más pues... ¡ya estoy lista!En eso que suena que alguien está pitando el claxon afuera.
Es Mike que me había venido a busca. Miro el reloj ¿Ya había pasado la media hora? Me dejo de tonterías, cojo mi bolsa y bajo a toda velocidad. No me gustaría hacerle esperar.Recien me ve le veo sonreir y me repasa de arriba a abajo.
-Hola, te ves muy guapa hoy.-Gracias - Digo flojito mientras me sonrojo y miro para abajo.
Él se ríe un poco y me abre la puerta del copiloto. Entro intentado parecer menos torpe de lo que soy, cosa que no consigo y acabo pareciendo un elefante que acaba de sentarse.-¿Dónde vamos?
-Es una sorpresa, tranquila se que te encantara- Vuelve a sonreír de esa manera que me vuelve loca. Arranca y me centro en intentar adivinar a donde vamos mientras conversamos de cosas triviales.
Veo que pasamos entre un bosque cerca del recinto del festival y se para en una explanada preciosa en la noche.
Sale del coche, me abre la puerta y me ofrece la mano. Nunca había estado con un chico tan atento y maravilloso como él.
- Espero que te guste el sitio desde aquí se ve la luna perfectamente y nadie nos molestará.
Decido ir a dar una pequeña vuelta y ver el lugar. Es una especie de pequeño acantilado desde donde se puede ver cerca el festival y las luces de la ciudad. No tiene rastros de que suela venir mucho la gente por aquí. Lo encuentro un sitio mágico.
Al poco tiempo aparece él con lo que parece ser una manta y una cesta con comida y bebida.
Lo arregla todo y prepara un pícnic.-Espero que te guste mi sorpresa, pensé que te gustaría.
-Me encanta, no podría haber pedido nada mejor- Estoy realmente emocionada y se me nota en todo momento.
Es maravilloso la cita perfecta él y yo en un pícnic a la luz de la luna que ya brilla roja en el cielo.
La luna me hace sentir algo extraña pero me centro en el momento que estoy pasando con él.Me ofrece un vaso de una bebida que no logro reconocer, tiene pinta de ser algo como champán o vino.
-Toma brindemos por nosostros.-Por nosotros- Y bebo del vaso. Tiene un gusto algo raro y le veo sonreír de una manera algo extraña.
-¿Que llevaba la bebida? - digo con preocupación.
-Nada, tranquila pronto no tendrás nada de que preocuparte. - Siento como empiezo a marearme y lo último que veo es un destello a él riéndose y una voz que no reconozco.
ESTÁS LEYENDO
El angel de la luna roja
RomanceEmma es una chica que siempre ha tenido dificultades en su vida. Justo cuando creia que las cosas le empezaban a ir mejor descubrirá que no todo es como ella creia.