Confusa

48 1 0
                                    

¿Y si esta noche te dijese que te quiero? Que tus besos han sido las mejores marcas que hayas podido dejar en mi piel, que tu boca ha sido el mejor pincel que hayas podido utilizar en mi cuerpo como lienzo.
Que tu sonrisa está grabada en mi mente, que conozco la forma en que me miras cuando quieres una caricia.
Que me encanta sentir tus manos recorriendo mi cuerpo, explorándolo, como si fuese la primera vez que lo tocases, sintiendo mis escalofríos subir por mi columna vertebral, provocándome temblores que te hacen sonreír de satisfacción.
Que lo quiero todo de tí, desde la mínima fibra de tu pelo, pasando por tus hoyuelos, recorriendo tu abdomen, hasta las uñas de tus pies.

Y sí, puede que esté loca, pero loca por tí, y por tus caderas que golpetean rítmicamente contra las mías, haciéndome saborear el cielo mientras tú intentas que me lo coma entero.
Y tus pupilas, que me miran como lanzándome una caricia discreta y luego un beso robado, un te quiero bastante falso, y el sonido de tu cama chirriante de nuevo.
Y caigo, me ahogo en tu mirada dejando mi cuerpo al mando y a mi alma llorando.

Porque me dueles, me dueles de una forma extraña e imposible, eres un dolor dulce pero profundo. Porque a tu lado me siento pequeña, insignificante y estúpida, porque sí, lo soy, pero no lo demuestro.
Y asumo que me asusta todo esto, pero nunca lo sabrás, nadie lo sabrá porque si hay algo que sé hacer bien, es mentir.

Pero cariño, no miento cuando entrelazo nuestras lenguas, ni cuando mi corazón palpita más rápido, ni cuando te acaricio la espalda en un tímido intento de mostrarte lo que siento, y lo sola que estoy porque para tí soy solo esto. Una chica cualquiera, que pasará al olvido, con la que algunos momentos has vivido, con la que algunos orgasmos has compartido. Y lo sé, pero aún así te tengo clavado en la garganta, y me matas cada segundo, impidiéndome respirar como el asesino robacorazones que eres.

Lanzastes tus redes y piqué, como la más ilusa sirena, dejándome llevar por tus caricias divinas y tus mordiscos peligrosos.

¿Te puedo pedir un favor? Déjame olvidarte, y te daré todo lo que quieras, pero haz que deje de sentir este dolor que me impide ser feliz, porque el amor es un juego de una persona y esta persona no está preparada para jugar sola.

Antes de partir, te dejaré unos versos mezclados con sentimientos encontrados y sabor agridulce.
Te quiero, pero quererte me está matando y prefiero morir a causa de un cuchillo clavado en mi corazón que a causa de tu recuerdo.
Te quiero, y no sé si es en serio o todo es una confusión horrible, pero quiero no quererte, o que me quieras también, pero ninguna solución es viable, solo el olvido es seguro.
Te quiero, pero te quiero olvidar.

Avísame cuando dejes de jugar con mi corazón, y por favor intenta no romperlo mucho cuando me lo devuelvas, porque esta noche no te diré lo que siento, ni esta ni ninguna otra.

El rincón de mis desvaríosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora