Attention Whores

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¿Alguna vez te dieron la espalda? Duele, ¿verdad? Te sientes como si te acabaran de bañar en ácido o te hubieran dado una bofetada de aquí a la luna. Ahora, imaginen sentir esto todos los días. En cada persona en la que intentas refugiarte, sentir el rechazo y la decepción día tras día.

Se preguntarán porqué estoy tan... Seria (?). Y es que hace no muchos días, mi familia se encontraba discutiendo respecto a las "attention whores" (por su traducción, zorras de atención), diciendo que eran cosas "de la edad", que "los chicos de hoy ya no son como antes", que "el Internet nos chupa la vida y nos vuelve frágiles", entre otras cosas.

Este asunto me llevó a reflexionar al respecto. ¿Realmente son cosas de la edad? ¿Es por la modernización? ¿El Internet nos vuelve frágiles?

Mamá, papá, ¿quieres saber por qué tu hija se corta, por qué se encierra todo el día en su cuarto, por qué piensa en el suicidio como posibilidad?
Porque no le prestas atención.

Ni el Internet, ni la edad, ni los tiempos modernos llevan a una persona a infringirse dolor. Es el rechazo el que destruye a una persona. Esa necesidad de tener a alguien a tu lado que te diga "Te quiero, estoy aquí para ti". Alguien que te pregunte sobre tu día, que se ría de tus chistes malos y que esté a tu lado en las buenas y en las malas. Sea mamá, papá, hermano/a, amigo/a, novio/a, eso es lo de menos. Simplemente necesitamos contar con alguien incondicionalmente.

¿Qué pasa cuando una persona nos pide ayuda? Podemos ayudarla, o podemos dejar que arregle sus problemas por cuenta propia. Podemos darle apoyo o podemos dejar que se vuelva fuerte a raíz de la soledad. Podemos pensar que tenemos nuestros propios problemas y no necesitamos los de otros o podemos ayudar a esta persona y luego contar con su ayuda.

¿Qué pasa si vemos a esta persona, que antes nos había pedido ayuda, ser miserable, solitaria y triste? ¿Nos detenemos a pensar en qué hubiera pasado sí simplemente la hubiéramos ayudado? ¿Nos causa rechazo y hasta un poco de asco? Probablemente lo segundo.
Sin embargo, pensarás que lo hecho, hecho está. Que no hay forma de remediarlo ni de cambiar el pasado. Pero nunca es tarde. No es tarde para ir junto a esta persona y decirle que lo lamentas, que no debiste darle la espalda. No es tarde para hacerle saber que estás ahí, que todos los errores que cometiste en el pasado los puedes arreglar mejorando el futuro. No es tarde para eliminar ese dolor latente en esa persona. Nunca es tarde.

¿Por qué nos causa tanto rechazo cuando vemos a una persona practicándose cortes, pensando en el suicidio, encerrándose en sí misma? ¿Acaso no nos ha pasado lo mismo? ¿Acaso no nos hemos sentido igual que esta persona? ¿Acaso no quisieras jamás volver a sentirte así?

¿Entonces por qué no haces algo al respecto?

Japiro | The Super-cool BlogDonde viven las historias. Descúbrelo ahora