Capituló 4

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-¿A donde ibas tan apurada?- preguntó el pelinaranja, Amber apuntó con su dedo índice hacia la tienda que hace unos minutos había visualizado, también el rugir de su estómago dio una pista hacia su pregunta.

-Tengo mucha hambre- sus manos fueron directo a su estómago para sobarlo como si eso disminuyera las ganas que tenía por probar algo dulce.

El chico le dedicó una sonrisa y tomó la mano de Amber llevándola a quien sabe donde, cuando ella vio esa acción freno de repente- ¿A donde me llevas?- el sonrió de vuelta y luego le respondió.

-A la tienda ¿No dijiste que tenías hambre?- Amber asintió lentamente- Te comprare lo que tu quieras-  Los ojos de la chica brillaron. Esta oportunidad tenía que aprovecharla porque no todos los días un chico lindo llega y dice que te comprara lo que quieras sólo porque tienes hambre, al menos eso no le pasa a Amber.

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-¿Qué es lo qué te gustaría?- Amber veía cada dulce deseando poder saborear cada uno, quería comprarlos todos pero no quería aprovecharse tanto.

-No lo se, son muchos dulces y todos parecen muy deliciosos.

-Toma lo que tu quieras, yo lo pago- en su rostro veía aquella sonrisa encantadora que no se cansaría de ver nuca y que quería ver el resto de su vida.

Ella quería pensar que iba a haber un futuro junto a ese chico. Aunque pensar en un futuro juntos era algo precipitado, Amber seguiría con su plan de conquistarlo en pie.

Luego de muchos rodeos Amber por fin se decidió y tomo 3 barras de chocolates, 2 paquetes de galleta y dos bubble tea. Al momento de pagar el pelinaranja saco de su bolsillo su billetera, Amber vio como una mueca se formaba en su bello rostro preocupandola- ¿Sucede algo?

-Mi amigo tomo dinero de mi billetera.

-Oh, entonces pagare yo.

-No es necesario- de inmediato la freno- tengo dinero escondido- le guiño un ojo mientras sacaba unos billetes de su bolsillo trasero- Siempre suceden estas cosas así que la mayoría de mi dinero lo tengo oculto.

La sonrisa que antes se había borrado del rostro de Amber se volvió a dibujar.

Al salir de la tienda un auto se estaciono frente a ellos con demasiada furia y de ellos salieron dos chicos apuestos, uno con el ceño fruncido y una mueca en la cara, el otro mantenía la mira relajada y seguía al primero. 

-¡JIMIN! ¡MALDITO BASTARDO! ¡¿DONDE LO DEJASTE?!

-Mierda- Amber de inmediato vio a su acompañante tenso al ver como aquellos chicos se acercaban.

-¿Quienes son ellos?- pregunto de inmediato la chica en susurro para que solo lo escuchara el.

-Taehyun y Jungkook, mis amigos- respondió antes de que aquellos dos chicos se pararan frente a el.

-¡¿DONDE LO DEJASTE?!

-¿A qué te refieres, Tae?

-¡EL DINERO! ¿donde lo dejaste? ¿Qué no ves qué me estoy muriendo de hambre?- Quien se suponía que era Taehyun hablaba como si Amber no existiera, y  Jungkook se dio cuenta por lo que codeo a su amigo y le dijo todo con una mirada.

-¿Quien es?- pregunto Taehyun a Jimin.

Por fin Amber ya había descubierto su nombre.

-Soy Amber- dijo de inmediato la chica al ver a Jimin nervioso, seguro porque el tampoco recordaba su nombre.

-¡Por fin superaste Kookie!- Tae abrazo a Jimin luego de gritarle a la cara aquello, la chica solo se quedaba mirándolo como si fuera un alíen.

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Siento que me tarde una eternidad en actualizar. Pero ya aqui les traje un nuevo cap. Espero que les guste, me fue algo complicado escribirlo.

Besos~~

Casualidad «Amber y Jimin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora