Capítulo 5

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La primera clase fue Adivinación. Heather se la pasó riéndose por el reflejo alargado de su cara en la bola de cristal.

-¡Oh, Señorita Rooney! -Exclamó la mujer con un tono de voz muy extraño- ¡Esta asignatura es muy seria! Con el futuro no se juega.

-¿Me lo va a decir usted a mí? -Preguntó con las cejas enarcadas la castaña, que recibió un codazo en las costillas por parte de su amiga- Mira, ahora predigo que usted dirá algo acerca de la muerte de Harry. Que por cierto no va a morir en tod...

-¡Perdónala profesora! -Se apresuró a decir su amiga- Está muy excitada por su primera clase.

-¿Excitada? -Preguntó después de que la profesora se centrara en Parvati y Larvender.- ¿Sabes que mi mente no es precisamente sana?

Harry y Ron las miraban desde la mesa de al lado, parecían bastante aburridos. Heather, al cabo de unos minutos, comenzó a inventarse el futuro de Charlotte leyéndola la palma de la mano. Las dos se reían, recibiendo miradas asesinas por parte de la profesora. Al acabar la clase se dirigieron a Transformaciones.

-Ya veréis -Les susurró Charlotte a los chicos- Heather es extremadamente buena en esta asignatura.

Se toparon con Abby y Cho en el pasillo, le pidieron a los chicos que continuaran sin ellas y observaron cómo Harry se marchaba sin dejar de mirar a Cho.

-Estás son mis dos mejores amigas, Heather y Charlotte -Las presentó Abby y ambas se dieron dos besos con la nueva chica, que por supuesto ya conocían. Aunque Heather la detestara.- Cho, ¿podrías ir a decirle a Flitwick que tardaré unos minutos en ir? Explícale que no me encuentro bien.

La chica asintió y se despidió de las tres, fue cuestión de segundos ver su figura desparecer por el pasillo. Resulta que daban Encantamientos con Ravenclaw.

-¡Tengo que contaros algo que me ha ocurrido con Ojoloco Moody! -Las susurró la rubia- Creo que sabe la verdad, me ha hecho preguntas extrañas del tipo: ¿Qué maldición crees que enseñaré ahora, Rosewood?

-Dumbledore no le ha comentado nada, solo unos pocos profesores lo saben -Razonó Charlotte- De todas maneras, hay que hablar con él. Nos dijo que hablaríamos una vez estuviéramos en Hogwarts, ¿os acordáis?

-Tenemos que volver a clases -Heather se impacientó. A ella no la gustaba perderse su asignatura favorita- Abby, prométenos que no te acercarás demasiado a ese hombre. Limítate a tener clase con él, no podemos arriesgarnos a que te torture con un patronus o un...

-¡Lo pillo! -Chistó Abby. Echó una rápida mirada al largo pasillo y abrazó a las dos- Nos vemos en el recreo, portaos bien, ¿sí?

Cada una se fue a su correspondiente clase.

-Llegáis siete minutos tarde, Rooney y Harvey -Las dijo la profesora McGonagall con un tono severo nada más ver que abrían con sigilo la puerta.- ¿Alguna excusa?

-Lo lamento mucho, profesora. Después de clase le explicaré la razón -Se excusó Charlotte y milagrosamente las dejó pasar. Harry pidió hacer pareja con Heather y Ron aceptó molesto, pues quería hablar de quidditch y de bromas con ella, pero recibió con una sonrisa a Charlotte. Hermione hizo equipo con Neville, porque solía ayudarle con las materias.

-Tendréis que convertir una lechuza en unas gafas -Dijo la profesora y repitió varias veces un movimiento de varita- Tenéis media hora. La primera casa que lo consiga recibirá diez puntos.

-Ese hechizo se aprende en quinto curso, profesora -Se apresuró a decir Hermione, quien parecía nerviosa por no conocer ese ejercicio tranformador.

De pronto en HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora