Había sido un día frenético para Flammy Hamilton, pero ella ya estaba habituada al trabajo duro del hospital ambulante. Miles de heridos habían recibido atención médica durante los dos días que la batalla había durado; sin embargo, aún más hombres estaban esperando su turno para recibir los primeros auxilios, luchando entre tanto por sus vidas. Flammy estaba exhausta pero tenía aún una última tarea que cumplir antes de que su turno terminase: debía colocar etiquetas en 150 pacientes que estaban en la lista de casos delicados. Tan pronto como llegase el tren, aquellos hombres serían enviados a diferentes hospitales en Château-Thierry y París.
La joven morena tomó la caja con etiquetas y un cuaderno con la lista de cada paciente que sería enviado aquella misma tarde. Era un trabajo de rutina, pero Flammy estaba consciente de la importancia de aquella simple tarea. Cualquier error podría tener consecuencias mortales si el paciente era enviado al hospital equivocado.
La joven empezó el trabajo con su eficiencia característica, no veía directamente a los rostros de los hombres. En lugar de ello solamente echaba una ojeada a los nombres en las etiquetas y a los detalles del reporte médico. En tales situaciones una enfermera no podía darse el lujo de tratar a los pacientes de manera muy personal, o no sería capaz de resistir la experiencia. . . Bueno, tal vez solamente una enfermera que Flammy conocía bien era capaz de enfrentar el desgaste emocional de involucrarse con sus pacientes, especialmente cuando éstos morían a cada segundo, pero Flammy no era esa clase de heroína de la medicina y preferiría simplemente mantenerse en la seguridad de su trato frío e impersonal.
A pesar de sus estrictos principios, ella no podía evitar que el corazón se le contrajera de vez en cuando al acercarse a un paciente y darse cuenta de que el caso no tenía remedio. En muy raras ocasiones la joven levantaba la vista para mirar a los ojos del paciente.
Flammy se encontraba justo en frente de un soldado con tres heridas de bala. La joven enfermera no requirió mucho tiempo para darse cuenta de que el hombre probablemente no sobreviviría. Una de las balas había penetrado a través de las costillas y era probable que estuviese moviéndose hacia el corazón. Ella había visto cómo en ese tipo de casos frecuentemente el paciente no llegaban a tiempo al hospital, sino que solía morir en el camino.
Fue entonces cuando, como si hubiese sido movida por una fuerza extraña, la joven levantó la mirada y vio al hombre. Flammy Hamilton nunca olvidaba una cara y aún cuando el hombre estaba transfigurado por el polvo, lodo y sangre que tenía sobre todo el cuerpo, ella inmediatamente lo reconoció.
¡Cielo Santo! – pensó - ¡Mi pobre Candy! ¡Qué cruel es la vida contigo!
Flammy observó los nombres del soldado y del hospital a donde el paciente había sido asignado: "Terrence G. Granchester, Hôpital Saint Honoré", rezaba la etiqueta.
La joven era sin duda la enfermera más eficiente del mundo. Sabía bien cómo hacer su trabajo y nunca cuestionaba el juicio de sus superiores, pero ese día, en contra de sus más caros principios éticos y profesionales, Flammy Hamilton hizo algo que nunca pensó llegar a hacer: cambió la etiqueta y escribió en una nueva: "Hôpital Saint Jacques"
Puede que él no se merezca esta oportunidad – pensó Flammy – Sin embargo, Candy sí se la merece.
Y acto seguido la joven continuó su trabajo con paso calculado.
Aún tengo que colocar las etiquetas de 76 pacientes más – se dijo a sí misma.
*****
Si bien Flammy estaba trabajando dura y sostenidamente en el hospital ambulante, Candy no estaba menos ocupada en París. Se estaban recibiendo nuevos pacientes cada hora y los quirófanos no eran suficientes para afrontar el número de operaciones que tenían que realizarse una tras otra. Candy había estado asistiendo en cirugía por unas cinco horas hasta entonces y era sólo el comienzo de un largo turno de 12 horas, quizá más.
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Candy Candy [Reencuentro en el Vortice]
FanfictionComo todos/as saben que el anime candy candy no tubo un final muy feliz pero como algunas personas se decepcionaron con ese final entonces: fanfiction de candy candy reencuentro en el vórtice en donde candy trabaja como enfermera y tiene que ir a u...