Yo y el amor que tanto busque [Peterick]

Parte 4

Pete aun me miraba con timidez

-Sé que esto no lo quisiste tú, desafortunadamente estabas en el momento equivocado y en lugar equivocado.

-Sí, eso fue hace un tiempo, no pude regresar a mi casa, ni ver a mi familia...

Notaba como se le quebraba la voz y unas cuantas lágrimas empezaron a salir

-...mis amigos, lo perdí todo, vine a este país a estudiar para ser mejor persona pero lo que no sabía es que llegue directamente a mi perdición. Intente todo pero estos malditos me quitaron toda comunicación con mi familia,Jack abuso de mi, me obligo a trabajar en este asqueroso lugar y el me vigila las 24 horas del día no tengo por donde salir.

-Ahora todo eso quedo atrás, porque yo te ayudare a salir, guarda tus cosas y saldremos de aquí.

El plan que Patrick tenía no era muy elaborado, solo era cuestión de exactitud. Le pidió a Verónica que distrajera a Jack haciendo que sus compañeras se pelearan entre ellas y así él se pudiera distraer para que Patrick saliera con Pete sin que nadie los viera.

Cuando empezaron a escuchar unos gritos, se dieron cuenta que en cualquier momento Jack saldría de su oficina para ver que estaba pasando

-¡Oigan ustedes! ¿Qué carajos hacen?

Escucharon detrás de la puerta, Patrick le dijo a Pete que se alistara para correr lo más rápido que pudiera. Noto que Jack ya estaba en el cuarto principal cuando tomo al moreno de la mano y abrió la puerta. Se aseguró de que no hubiera nadie que los viera y corrieron lo más rápido posible del Club hasta llegar a las engentadas calles de ese sitio, corrieron entre la gente ebria y los carros, recibiendo maldiciones de los que salían golpeados en sus hombros.

-Corre Peter, ya casi lo logramos.

Corrieron como si su vida dependiera de ello hasta que llegaron a una zona más segura. Los dos chicos respiraron agitados y se tomaron un momento pero no demasiado ya que alguien los podía ver. Patrick vio un taxi y subieron rápidamente en él.

Llegaron al hotel donde Patrick se hospedaba y en recepción el explico que Pete era un amigo y que se hospedaría en la misma habitacion que él.

-Adelante

Patrick le dijo de manera amable invitándolo a pasar a su habitación y directamente Pete fue a la ventana, vio la hermosa vista que tenía, ya que nunca había estado en un edificio de más de 3 pisos sus ojos se iluminaron y sonrió.

Patrick al verlo también sonrió y se puso a lado.

-Hermoso ¿no?

-Sí, muchísimo, este tiempo parece como si hubiera estado en la obscuridad

-pues ahora ya no lo estarás, por que mañana mismo nos vamos.

-¿Qué? ¿pero a dónde?

-a buscar a tu familia ¿dónde vivías?

-yo..vivía en Chicago con mi familia pero después de que me fui independiente vivía en Los Angeles.

Patrick sonrió grande cuando escucho eso

-¡que sorpresa! ¡yo también vivo ahí!,no hay problema podemos irnos

Pete puso una mirada triste y se sentó en la cama

-¿Qué tienes?

-cuando llegue allá no sé qué hare, después de mucho tiempo me imagino que la escuela ya me dio de baja y mis padres dejaron de buscarme, y yo tenía un pequeño empleo.

-no te preocupes yo te ayudare, en todo lo que necesites

Pete ahora sonrió grande

-¿de verdad harías eso por mí?

-¡sí! tenlo por seguro

El chico moreno abraza al rubio fuertemente

-gracias, gracias por haberme salvado, no tengo con que pagarte.

-no es nada

Después de abrazarse ambos se quedaron viendo a los ojos, Patrick observaba bien a Pete tenía unos lindos ojos color miel, a pesar del golpe y la cicatriz, tenía una sonrisa hermosa, su cabello estaba algo desordenado, no muy largo de color negro, sus brazos y varias partes del cuerpo tenían tatuajes y a pesar de que no comía muy bien tenía un abdomen bien torneado.

Pete hacia lo mismo con Patrick, miraba sus ojos ojiverdes que parecían cambiar de color, piel blanca como si fuera un copo de nieve ,no tenía el gran cuerpo pero se notaba que había perdido peso, sus labios rojos y carnosos que le notaban bastante gracias a su tono de piel y la sonrisa más hermosa que haya visto.

Patrick no sabía que estaba pasando en ese momento,pero su corazón empezó a palpitar muy rápido, sus manos empezaron a sudar, reacciono, al saber que una vez más su corazón le quería jugar una mala pasada, así que solo se volteo y fue al baño un poco agitado y Pete lo siguió preocupado.

-Patrick ¿qué tienes? ¿te sientes mal?

Dijo el moreno asustado

-no...es que solo...tengo miedo..

-¿miedo? ¿a que?

-a amar otra vez...