Morby. «¿Mejores amigos o más que eso?»

Capítulo 1; Otro nuevo día sin nada aquí...

8am, suena la alarma y yo no quiero despertar, pero al fin es viernes. Así que hay que intentar sacar este cuerpo de la cama, ¡maldigo a Benson por todo esto! Para colmo hoy no será el mejor de los días... No quiero salir. ¡No quiero! Pensaba Rigby, mirando al techo y luego cubriendo su rostro con la sábana. Era el día de su cumpleaños número 16, sólo quería terminar el méndigo trabajo y jugar videojuegos con Mordecai. Mordecai.... se acordó de su querido amigo, era la única persona la cual podría animar su día, se acercó y pudo ver como aquel azul flequillo caía encima de los ojos de él. Había dormido solamente con pantalones/pijama, sintió que sus mejillas ardían al ver qué tan marcados abdominales tenía... Maldito seas tú y tu encanto. Rigby había aceptado, «luego de una enorme batalla con sí mismo» no encontraba el por qué, pero sus sentimientos hacia Mordecai eran diferentes. Lo amaba, lo quería para él, pero no podía decírselo, no quería correr el riesgo de perderlo.

- Oye, ¿qué tal? ¿cómo es que te despertaste tan temprano mi pequeño dormilón?- preguntó Mordecai. Rigby se sonrojó aún más que antes, 1: No podía creer que se haya despertado y él seguía observándolo. 2: Mordecai estaba demasiado cariñoso hoy, lo que hizo ponerlo nervioso y confuso al pequeño.

-Yo... Yo dormí lo suficiente, aunque espero luego no me sienta adormilado jajaja. - encogió los hombros y luego de unos segundos sintió las manos a su amigo en su cintura -Mordo... que... ¿qué haces?- pregunto Rigby, sentir el tacto de Mordecai lo hacía sentir maravilloso, incluso con una simple palmadita en la espalda. Lo volvía loco.

-Hmmm, vamos, tengo una forma de asegurarme de que no pasarás cansancio en el trabajo luego... acompáñame en la cama. - tironeó al moreno a su cama, con su pequeña espalda delante de su gran torso casi desnudo, pasó sus brazos y quedaron en un perfecto "abrazo koala". -Dios... Mordecai, ¿debías hacer eso? Eres un tonto...-ríe- pero te acompañaré. - Su cuerpo tembló un segundo cuando la mano de su adormilado Mordecai calló justo en su cintura, muy cerca de su... paquete.

-Por favor, no te excites, por favor, no...- Repetía el pequeño en su mente, tanto soñaba con su compañero, tantas cosas, y ahora esa posición no iba a relajarlo para nada, nada de nada.

-¿Rigby...?- preguntaba el azulado medio zombie, estaba cansadísimo por el trabajo del día anterior. - Te quiero mucho Rigby...- Rigby quedó en shock, ¿era verdad lo que decía? Habrá estado pensando en CJ, o Margarita, seguro es eso... aunque... él dijo mi nombre. Sintió cómo los brazos de Mordecai lo apretaban más hacia él, y como éste hundía su naríz para oler el cuello del pequeño, esa fragancia dulce...
No sabía como reaccionar, no quería aprovechar del momento, pero quizás él estaba pensando en una de las chicas, aunque no las nombraba. Eso era muy raro para él, sentía millones de mariposas explotar en su estómago, sentía como esa erección era tan dolorosa que tuvo que dormir sólo en bóxers.

Mordecai.

Estaba demasiado cansado, medio muerto, pero no fue suficiente como para engañar a Rigby para que se acueste conmigo.
Luego de tanto tiempo encerrando en mi mente la supuesta belleza de Margarita, éste me rechazó, me destruyó, así que sólo me acostumbré al parque, los chicos... Rigby. Por alguna maldita razón ayer creí que lo amaba, y ahora... ahora sí creo que lo creo. No quiero dejarlo ir... ese aroma es tan delicioso, quisiera probar sus labios... saber qué se siente ser correspondido, quiero hacerlo mío.

-Ahh... ahhh...- gimió Rigby, lo cual me sorprendió, y claro... si mi erección estaba apoyado en su gordito trasero.¡Madre mía!

.Rigby...- respondí... -¿Qué tal si..? - tenía que preguntarle...

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/n\ ¿qué le preguntará Mordecai y RIgby?