Capitulo 9

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Corría sin rumbo fijo entre un espeso bosque, me quedaba sin aire, mis pierna duelen, mis ojos pican y  aun así no dudaba en huir ¿por que?.

llegue a un piso rocoso y allí mis fuerzas me abandonaron  me desplome en el piso, no, no, no sentí pánico mi hermana me esperaba Kaoru me esperaba no debía dejarme caer  me arrastre entre la filosas rocas y el mar se extendió ante mi, la orilla era muy  lejana las enormes rocas se alzaban amenazantes de una muerte segura, no, debía intentar bajar para encontrar la salida... debía.

Pasos 

a duras penas intento pararse, ante ella una figura se alzo y le reconoció, su corazón comenzó a normalizarse ¡estaba a salvo! pero...

La figura se acerco más a ella y entonces le tomo por los brazos alzándole completamente, ella comenzó a ponerse nerviosa se encaminaba al precipicio ¿por que? 

-No !!!- suplico al sentir la brisa marina en la cara y el fuerte viento- ¡No!-pero la figura solo la soltó

Caía en cámara lenta viendo la sonrisa torcida de su asesino -¡No! ¡tu no!- pero seguía cayendo...entonces sintió el dolor de las rocas antes de la helada agua a su espalda...

Rei sobresaltada despertó, sudaba y a su alrededor figuras la observaban.

Maldición, maldición 

No, dentro de todo su reparto de maldiciones personales estaba ese sueño de un pasado que no  volvería, sin poder evitarlo lloro, siendo consolada por unas manos en su espalda, manos y cabeza esos mimos solo intensificaron el llanto, ¡por que el maldito pasado me acosa?, ¿debía pagar por el pecado que no impidio?, sabia que era inútil, incluso dios no puede borrar el pasado.

Se calmo y vio a sus protegidos sus miradas preocupadas se le clavaron en el corazón, no quería despertarlos con algo que se supone enterrado, Taiga era el que le daba palma ditas en la espalda y Takao quien sostenía sus manos mientras Kasamatsu era el de las palmaditas en su cabeza, mientras Kuroko y Himuro traían un vaso con agua y una toalla.

-Lo siento chicos-su voz sonaba ahogada como si realmente hubiera intentado salir del agua helada, tomando el agua y la toalla seco sus lagrima y sudor, se sentía mejor mientras tomaba el agua. 

-Estas mejor?- Takao preocupado le tomo las manos de nuevo 

-Si, es un mal sueño-

-Pero, llorar así no es normal-Kasamtsu frunció el ceño-Tu eres de las personas más fuertes que conozco- miro con verdadera preocupación a Rei-

-si, lo se pero incluso yo tengo un talón de aquiles-les miro con dulzura-ya estoy mejor- les devolvió los objetos y empezó a acomodarse pero su cama fue invadida por todos-¡¿Que hacen?!-

-No dejarte sola Rei -san-Kuroko se instalo a su lado mientras los demás a su alrededor-Taiga-kun, hacia lo mismo cuando tenía pesadillas- su hermano se sonrojo levemente pero siguió acomodándose el la cama 

-Lo sé-Rei sonrío al recordar el pasado 

-Bueno entonces a dormir para que las pesadillas no vuelvan-Takao le regalo una sonrisa en su otro costado

-Estarás bien-Himuro le dio una sonrisa 

-Si debes dormir mañana te haré tu comida favorita-Taiga le reconforto con su sonrisa

-Bien mañana, Hamburguesas -Rei se comenzaba a relajar, mientras todos a su alrededor también comenzaban a dormir-oía sus respiraciones y al final cayo en la inconsciencia sin sueños.

A la mañana siguiente la sirvienta les encontró enternecida al ver que se tomaban de las manos despertó primero a Rei y le dijo que su majestad esperaba, ella asintiendo comenzó a levantar a los chicos, mientras se bañaban y vestían ella recibía un paquete de Kaoru junto con las maletas de ella y los chicos, eran grandes guanteletes, hoscos de piel negra y con cinturones para fijarlos al brazo varios adornos estaban grabados en la piel del exterior, la que era vista, formaban patrones de flores y aves en tonos plata y oro en el borde con pequeñas joyas incrustadas de color rojo, azul, verde, ámbar y onix. Espero que los chicos terminaran con batas recogieron su ropa y mientras se vestían ella tomo un baños llevándose la ropa, cuando termino traía un conjunto chino en tonos grises, pantalón blanco y los guanteletes, zapatos negros.

Los chico llevaban ropa china menos llamativa que la del baile, simple pero que iba de acuerdo con el color del baile anterior, salieron al comedor.

En el comedor

El emperador en la enorme mesa esperaba a su prometido y familia, sabía que llegarían pronto y comenzó a hacer planes para el día, les mostraría el castillo, el jardín, en fin de cuentas todo. Fue entonces que sus amigos llegaron y se sentaron todos se veían muy relajados pero al abrirse la puerta y ver a los jóvenes se sentaron correctamente. 

Bien al menos se comportan  pensó Rei y mirando bien había un asiento vació a cada lado de los chicos alzo una ceja escéptica si claro coincidencia.

Entonces sentó a cada chico con quien lo hilos mandaban  "No se debe ir contra el destino" al finalizar se sentó al lado de Taiga y Aomine.

Bien, ¿que les gustaría desayunar?-Akashi sonrío un poco pues Tetsuya estaba a su lado, mientras observaba un palea de su rubio amigo por abrazar a un sonrojado Kasamatsu-Después iremos a recorrer el castillo-Una orden a la Rei sonrió con nostalgia. Desayunaron y entre bocados Rei miro a los chicos Takao hacía sonrojar a Midorima, Himuro vigilaba a Murasakibara que comía, un sonrojado Kuroko era la causa de la sonrisa de Akashi, mientras a su lado Aomine coqueteaba con Kagami que estaba tan rojo como su cabello.

-No puede entrar -voces al otro lado de la puerta llamaron su atención y la puerta fue azotada por un peli gris-regrese chicos-  

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