Me puse recordar.
Recordaba aquel día en el que fui a comprar con mi hermano y vi como le atropellaban por mi culpa. Debí haber mirado si estaba en rojo, debí haber cuidado mejor de el.
Recordaba el día en que mis padres se separaron. Recordaba aquel día que mi tío me agredió y mis padres no me creían. Recuerdo la primera vez que me corté los brazos y la libertad que sentía. Recuerdo mi primera pareja y el daño que me hizo. Lo recuerdo todo, o al menos eso creo.
No hay recuerdos positivos, no los hay. Nunca existieron.
Recuerdo el daño que me hacían al insultarme en el instituto y las ganas de irme de este mundo. Recuerdo tener que esperar a que fuera de noche para llorar y que no me escucharan. Recuerdo tener que fingir las sonrisas todos los días. Recuerdo la primera vez que intenté suicidarme y no lo hice por mi hermano pero, después de que mueriese, esa excusa no valía. Recuerdo pasar horas frente el ordenador para evadirme de la realidad...simplemente, recuerdo.
