¿Era deseo o Era amor? [Liam y Tú]

cont. capitulo 1: abrigo

El viaje no fue largo, el problema fue al bajar.

-Bien, ¿cómo piensas despertarla?

-Ewr… Oye. –la agite un poco- niña, reacciona…

-Creo que no reacciona

-¡Bah! –suspiré- Zayn, llévate mis cosas, tendré que cargarla.

La cargue como si fuera un costal de papas, en realidad, era delgada, pero el abrigo que llevaba pesaba toneladas, hubiera sido lindo haberla cargado sin el, hubiera podido aprovecharme un poco de la situación pero como ya dije, su abrigo estorbaba. Tomamos el taxi, llegamos a la casa, Niall abrió la puerta, aventaron las cosas y se fueron directo a la cocina, con cuidado, la deje a ella en el sofá.

-¿qué hay para comer?

-hay algo de sopa fría y creo que hay pedazos de pizza

-ewwwr.. creo que hay que ir de compras

-buen punto, tenemos que llenar la despensa –aseguro Niall- subiré por dinero

-igual yo –agrego Zayn

-Claro, yo iré al baño

Entré y moje un poco mi rostro, saque mi playera, iba a colocarme otra, tenía que subir a mi cuarto por una limpia, giré la perilla del baño y ahí estaba ella, como en shock parada en el centro del living.

-Oye… -susurré

-Podrías por favor decirme en dónde estoy –me interrumpió

-En mi… casa?

-Y… ¿Qué hago aquí?

-Veníamos en el avión y hubo una turbulencia entonces…

- de seguro me desmaye

-Si, te desmayas mucho tiempo ¿sabes?

-Si, lo se –paso su mano por su ondulado cabello

-¿Quieres irte a casa o algo?

-Iban a recogerme en el aeropuerto ¿Puedes llevarme a un Taxi? Necesito ir a mi casa

-¿a tu casa?

-Si, me urge irme ya –se tomo la cabeza

-¿Te sientes bien?

-Si –dijo seria-

-Tu cabello

-¿Qué tiene?! –pregunto exaltada

-Es… lindo –guiñé un ojo

-Ni se te ocurra intentar algo conmigo, esos músculos no te ayudarán en mucho

-Oh, cierto, no tengo playera puesta, iré por una ¿de acuerdo?

-Es tu casa, haz lo que quieras

-Si, ahm, ponte cómoda… ¿Quieres que suba tu abrigo?

-No –dijo apenada

-¿segura? Te ves horrorosamente acalorada -¿cómo no? Su abrigo llegaba hasta debajo de sus rodillas.

-De acuerdo –lo retiro poco a poco y logré ver su camiseta pegada a su cuerpo la cual marcaba sus perfectas curvas y un pequeño short de mezclilla rasgado.- toma –tome el abrigo y me fue imposible no ver su hermosa blanca y tersa piel.

-Bien, ahora bajo y me acompañarás a hacer compras ¿de acuerdo? , después te dejo en un taxi

–De acuerdo, no soy niña pequeña, entiendo, no tienes porque hablarme como si fuera tonta ¿si? –asentí, ella suspiro- Pero que sea rápido