A tu lado siempre estaré ©

Dos.- ¿Una mala lección?

  —Lo siento Kyle, lo siento de verdad— fue lo último que pronunciaron sus labios al largarse con aquel idiota. 

 Pase un gran rato ahí tirado, pensando que otra tontería sería capaz de hacer por aquella mujer, hasta que Julio llegó y me acompaño a casa.

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 Al día siguiente mientras iba caminando con Julio hacia la institución le estaba contando lo que había sucedido ayer, Julio me regaño pero a la vez dijo que estaba bien y que fue un acto muy bonito. Apenas entrando al instituto —te espero afuera, tengo que hablar contigo— me dijo Chloe. Así que Salí y ella estaba en la entrada, me tomo de la mano y me llevo a la parte de atrás, un lugar donde solo se veían personas en el momento libre, yo pasaba mucho tiempo en soledad ahí, fui yo quien le conté eso.

— ¿Por qué hiciste eso ayer Kyle?—  

— ¿Está mal que lo haya hecho? Yo solo no quería que pasara nada—  

—No, no estuvo mal, pero... ¿Por qué arriesgarte por mí?—  

—No lo sé, quizá solo fue algo estúpido, solo olvídalo— dije apartando la mirada de ella.  

—No fue algo estúpido, fue lo más hermoso que alguien haya hecho por mí— al terminar esa frase me tomo del brazo y me beso.  

 Esa tarde nos quedamos ahí y no entramos a clases, ella se fue primero, yo me quede hasta que había oscurecido, cuando decidí marcharme comenzó a llover, lentamente camine a mi casa, mientras las gotas de lluvia acariciaban mi rostro, hasta que sentí un fuerte golpe en la cabeza, y perdí el conocimiento.  

~~

 Desperté en mi casa, atado a una silla en mi habitación, a oscuras, una fuerte luz cegaba mi vista por lo que no podía distinguir muy bien a las personas que estaban ahí, solo veía tres siluetas, una al fondo y dos delante de mí, una parecía una mujer, y el otro lo reconocí fácilmente, era el novio de Chloe, nunca fui capaz de recordar su nombre.. 

  — ¿Dónde está tu sonrisa héroe? ¿Ahora no eres tan valiente verdad? pues si lo que ve Chloe en ti, es tu cara y tu valor, te arrebatare ambas cosas pequeño bastardo, quiero que supliques—  

Yo no conteste nada~

  —Valla, la perra no entiende en qué situación se encuentra, hazlo entender Kiki— dijo dirigiéndose a la otra silueta, mientras la besaba, era una mujer de baja estatura, fuertes brazos y piernas, vestida de negro, con su cabello negro, una cicatriz en el rostro y unos nudillos de hierro, con los que comenzó a golpearme en el rostro.

  Golpeaba mi rostro consecutivamente, sentía como había partido mi nariz, como había partido mi mentón, mis labios, me había roto la frente, la parte superior de mi ojo, cada golpe parecía más fuerte que el anterior, mi cara ensangrentada ya no podía más, pero aun así no pronuncie ni una sola palabra, y no solté ni un solo grito.

 Aquel tipo, sujeto mi cara —Suplica maldita escoria, quiero escucharte rogar para que te deje vivir.

— pero yo solo miraba el piso — ¿qué es lo que tienes con Chloe? ... contesta maldita sea— ahí pronuncie mis únicas palabras.

—la tienes a ella, y aun así juegas con Chloe... eso te hace más miserable de lo que pareces— e hice el intento de escupir, llenando de sangre el rostro de aquel idiota.    

 En ese momento se transformo, empujo a Kiki a un lado y me pateo tumbándome con la silla al piso, y ahí siguió golpeándome, patada tras patada, mis costillas se escucharon romper, mi hombro se disloco, solo pude notar que la figura que estaba al fondo se fue de aquella escena, de pronto Kiki sujeto a mi agresor, y escuche a lo lejos que le dijo, vamos yo no vine a matarlo, mejor vámonos, déjalo así ya entendió la lección, a demás me excita cuando te pones así.  

  —valla, al parecer otra mujer te ha salvado el pellejo, espero entiendas ahora que es lo correcto, claro si es que sobrevives...— el siguió hablando, pero no alcance a entender lo que decía por que todo empezó a tornarse negro y perdí el conocimiento una vez más.