Asustada

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- Kyle, ya callate- grité por el teléfono.- Dejame hablar a mi-

- Zoey, ¿es que no lo entiendes?- me cortó.- Emily no puede estar con alguien como el.- murmuró.

- ¿Por qué te molesta tanto que esté con él? Dejala ser feliz Kyle. Has tu vida.- respondí empezando a enojarme

Emily había empezado a salir con un chico y se la veía muy entusiasmada. En cambio Kyle no opinaba lo mismo. Desde hace días me decía que el no era el chico indicado para ella y que le iba a romper el corazón o algo así. Nose porque se preocupaba tanto por Emily. Yo entiendo que sea protector con sus amigas, porque conmigo también lo era, pero con ella se pasaba. Si ella era feliz, era suficiente para mi.

Escuché un bufido del otro lado del telefono- ¿Es que no lo puedes ver?, Él le va a partir el corazón. Si tu quieres que eso pase, déjala. Por amigas con vos pasan esas cosas. Emily no se merece tenerte de amiga- gritó.

Ese comentario me dolió. ¿Cómo podía decir eso? ¿Qué le pasaba? El me conocía mejor que nadie. Habíamos sido amigos desde niños. - Si opinas eso, no entiendo porque somos amigos. Si soy la peor amiga del mundo, no entiendo porque no dejamos de serlo hace mucho.- respondí con la vos quebrada. Corté la llamada y arroje el celular al sillón. Estaba furiosa y muy dolida.

La respuesta de Kyle seguramente fue obra del enfado del momento. Él no quería decir eso. No se si lo que dijo lo sentía de verdad o fue reflejo el momento. Pero lo había hecho y me había dolido. Ahora solo necesitaba despejarme un poco.

Decidi llamar a mamá, ya que hace mucho que no hablaba con ella. Marque su numero y esperé que me atendiera. Después del cuarto pitido atendió.

- Zoey, ¿hija qué necesitas?- dijo apurada.

- Nada, solo llamaba para saludar.- me excusé. Parecía como que no quería hablar conmigo.

-Me alegra tu llamado, pero ahora no puedo hablar. Estoy en medio de algo importante. Después te llamo. Te amo besos -dijo y corto. No me dejo ni siquiera despedirme.

Mi madre siempre estaba ocupada y no tenía tiempo para mi. No había nadie nunca de mi familia. Mis padres vivían viajando y no tenia hermanos. Me sentía cada vez más sola. Tenía muchas de lágrimas acumuladas que iban a a salir en cualquier momento. No lo pensé mas y tome mi bicicleta. Me subí en ella y empezé a andar sin rumbo alguno.

Cuando llegué a un lugar en el cual ya no se veía ningún edificio decidí parar. Salí del camino y me baje de la bicicleta. Me metí en el bosque que estaba al lado del camino. Era un lugar precioso, se podía escuchar el canto de los pájaros y había mariposas revoloteando. Avanzé un poco más entre los arboles, hasta que me topé con un río.

Dejé la bicicleta contra un árbol y me senté en un banco junto al río. Parecía ser el lugar prefecto para pensar. Levanté la cabeza y miré el horizonte. Un montón de emociones se estaban apoderando de mi en ese momento. Estaba enojada, dolida, molesta y un poco triste.

Un montón de cosas rondaban por mi mente. No pude evitarlo más y me largue a llorar como una tonta. Quería parar pero las lágrimas salían por si solas. Miré el suelo y de pronto una piedra callo a mis pies. Levante la cabeza asustada y mire por todos lados en busca de alguien, pero no vi nada. Miré la piedra extrañada y la levanté.

Al alzarla, me di cuenta que tenia una nota pegada. Un poco confusa, la despegué y la desdoble. Mire el interior atentamente y rei al leer: "Deja de llorar, que se te corrre el maquillaje y pareces un payaso". Me sequé las lágrimas y miré a todos lados en busca de el dueño del mensaje. Lo llamé pero nadie contesto. Aunque tenía mis sospechas sobre quien podía llegar a ser, no estaba tan segura en ese momento.

Como estaba empezando a anochecer y mi mensajero no iba a aparecer, decidí que era hora de volver. Tomé mi bicicleta y caminé de vuelta el camino hasta llegar a la ruta. Me subí en mi bici y pedalie de vuelta en casa.

Al llegar dejé mis cosas sobre la mesada y la bici en el pasillo. Entré a la cocina y puse una olla con agua para hervir. Iba a prepara fideos con salsa, ya que hace mucho que no comía y los amaba. Mientras el agua se calentaba, me dirijí a mi habitación a cambiarme. Me saqué la remera y el pantalón y me puse mi pijama. Dejé mi ropa en la canasta de ropa sucia y volví a la cocina para poner los fideos.

Mientras ponía los fideos un mensaje apareció en mi celular. Dejé todos en su lugar y me cargué un vaso de agua. Abrí el mensaje y mi vaso callo de mis manos al leerlo. Miré de vuelta a lapantalla para corrobar que es ojos no me engañaban pero me paralice al leer: "Te veías hermosa hoy en la tarde con esa sonrisa radiante. Lastima que no te durará mucho"

Alguien me había estado espiando y había conseguido mi numero. La persona que estaba haciendo esto me quería asustar y lo había conseguido. No sabia quien podía ser. Pensé en mis amigos, capaz que Kyle quería jugarme una broma. Pero él no seria capaz de tal cosa. Emily menos, estaba muy ocupada con ese chico para pensar en jugarme una broma así a mi. Se me venía a la mente Niall, era una persona misteriosa y fría pero sentía que no había sido el.

Dejé el celular en la cocina y borré todas las ideas de la mente. Me servi la comida en un plato y me senté en la isla de la cocina a comer. Prendí la televisión y puse una película de comedia para reírme un rato.

A los diez minutos otro mensaje apareció en la pantalla. Me acerqué y lo abrí. " Ríe todo lo que puedas ahora porque después no podrás". Eso fue suficente para quitarme las ganas de comer. Dejé todo en la cocina, ni siquiera me preocupe en lavar los platos y me fuí a mi pieza. Me aseguré de que esten todas la ventanas cerradas y me acosté a dormir.

Nosé que iba a a hacer con estos mensajes. Debería decírselo a alguien pero la policía no iba a hacer nada. Consideré la idea de decírselo a Niall pero esa idea se esfumó de repente. Cerré los ojos tratando de olvidar todo.

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⏰ Última actualización: Apr 02, 2016 ⏰

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Behind those blue eyes-[N.H.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora