Mi nueva vida (Gruvia)

Capítulo 9

Mis ojos arden menos que antes, sin embargo el dolor en el corazón sigue intacto. E incluso se ha esparcido por todo mi cuerpo hasta llegar a mi estómago. A eso de las 7 p.m mi hermano tocó la puerta, él fue el único que deje entrar desde que llegue. Hablamos de lo que pasó en el comedor esta tarde, me dijo que todos mis amigos debían estar muy preocupados por mí. Tal vez debería llamar a alguien, al menos a Lucy que se encuentra en la misma situación que yo. Antes de poder marcar su número, recibo una llamada de Levy.

-Levy-san...-

- ¡Ju-chan! Gracias a dios que contestas. Todos están intentando llamarte ¿Por qué no contestas? -

- Juvia lo siente, no debió escuchar las llamadas. ¿Cómo está Lucy-san? -

- Mejor, necesitaba un poco de nuestro apoyo. Apenas te fuiste la acompañé al baño y fue entonces donde se quebró. Lloro como media hora pero era lo que necesitaba. -

- Mhm... -

- Creo que tu necesitas lo mismo, sé que Gray fue para allá. También que tu madre no lo dejó entrar porque le ordenaste que no dejara que ninguno de nosotros pase, al parecer querías estar sola. ¿Prefieres eso? Por si es mejor para ti, no te forzaremos a nada -

- No... Apenas habló con su hermano *snif* -

- Ya... no llores más. Con los demás tuvimos una idea. Una videollamada grupal ¿Qué te parece? Así todos podemos hablar de una pequeña sorpresa que estuvimos guardando -

- Está bien...esperará a que llamen. Gracias Levy-san -

Espero cinco minutos hasta que recibo la notificación de la llamada. Mis dedos están temblando, pero logro atender...treinta segundos después. Ahí están todos, con su caras sonrientes. Por supuesto para no demostrar la pena que me tienen al ver mis ojos y mejillas rojas. Cada uno me dicen diferentes cosas que me sacan sonrisas. Gray-sama dice que lo demás lo hablaremos a su debido tiempo, cuando me sienta más cómoda. Todos saben que lo que dijo Daphne hoy fue todo mentira, aunque solo se refieren al desmayo intencional. 

-Okey, chicos. Estuve pensando que ya  se acercan las vacaciones de invierno ¿No? Entonces podríamos viajar todos juntos a algún lugar por una semana ¿Qué dicen?- dice Levy. Al principio me alegro, pero ahora recuerdo.

- Juvia no puede. Cada año en las vacaciones de invierno Juvia y su familia se van de vacaciones, ella suele cambiar el destino pero creé que ahora iremos a unas montañas cerca de aquí -digo, no tengo intenciones de arruinar sus planes. Aunque creo que ya lo hice.

- ¡Tengo una idea! Si llevamos un computadora y especificamos un horario para hablar con Juvia podremos saber cómo está y contar algunas anécdotas. No será lo mismo pero bueno, al menos podremos vernos -. 

Es una gran idea, de hecho. Discutimos un poco más y acordamos el horario, luego nos vamos a dormir (o lo que sea que hagan ellos). Antes de acostarme siento un calor en el corazón que me hace sonreír. 

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- Juvia, te vinieron a despedir tus amigos- grita mamá. Bajo rápidamente para saludar a todos.

- No solo tienes una casa gigante, también un auto muy grande y moderno, ¿Cuántas personas entran aquí? ¿6? -dice Natsu. Creo que tiene razón, por algún motivo lo usamos pero no sé exactamente cuál es.

- Bueno es todo gracias a mamá, creo que le encanta llevar un montón de cosas a todos lados ¿Verdad ma? -.

- Si, si lo que sea ¿Dónde está Jessica?¿Y las llaves de la casa? -dice desesperada, como siempre.

- Las tienes en tus manos y estoy atrás tuyo -contesta Jessy. Presencia el teatro de la familia Lockser

- Bien gente, dentro del auto, rápido -y ya entró en el auto.

- Adiós chicos, nos vemos a las siete ¿Si?... Los voy a extrañar -.

Ya metida dentro del auto los veo saludar a todos hasta que giramos en la esquina y desaparecen. Me coloco los auriculares y me dejo llevar por la canciones de mi celular. 

Vuelvo a sentir el calor en el pecho, y antes de que me de cuenta, estoy llorando de alegría.