Pena

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Paso una semana, con mucha dificultad recordaba el habar, por 3 días olvide comer, y por 1 minuto el respirar, me fue espantosa esta vida, nadie aceptaba a alguien como yo, un niño vago e inmundo, no merecía la pena de alguien, puesto que parezco una bestia entre personas, unos de la clase mas baja, los que aprenden a mendigar y robar, los que atacaban y cazaban, los que no vivían, solo respiraban, de mi se fue la esperanza de la llamada felicidad, la que se supone graba una sonrisa en tu cara, sonrisa, acción hecha por los músculos faciales, que transmiten un sentimiento positivo o posiblemente solo sea un adorno, una simple silueta grabada en tu cara, pero bueno, no les digo esto por hablador, sino por experiencia propia, el hecho de robar conlleva a tener buena pinta, o bien, parecer un niño pobre y agradecido, frágil y débil, sin esperanzas, buscando la mano de un ser noble... Siempre era lo mismo.

Cielos, Me apena mucho mi pasado, pero ustedes comprenderán que cuando uno esta con lobos, aullar se enseña, fue tanto el ver a mi "competencia" o compañeros bandidos, que de ellos se aprende mucho, y de vez en cuando se convive con ellos, comencé a tener amigos, comencé a tener algo que pueda llamar casa, comencé a tener recuerdos, comencé a tener una vida...

De Vida En VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora