Garrix & Me (Spanish Adaptation)

Capitulo 16

*Narra Zoe...

"¿Deseas que te maten?" Grito Martin en mi oído. Sus brazos estaban envueltos firmemente alrededor de mi cintura.

Sin embargo, mis ojos están fijos en un solo lugar: mi madre. Ella hablaba con un oficial d policia. 

"¡Mamá!" Grito, mas que las sirenas "¡Mamá!"

Ella se da vuelto y sus ojos se abren. Pude notar como ella estaba llorando, de hecho, mis propios ojos se reflejaban en los de ella cuando estamos frente a frente.

"Zoe... ¿Qu...?" Ella se detiene y caminando dificultosamente se acerca a mi para abrazarme.

"¿Que paso? ¿Donde esta papá?" Pregunto mientras mis lagrimas empapan mis mejillas.

"Él... Lo están intentando sacar del coche..."

Me siento mal e intento ponerme de rodillas, pero una persona me agarra. Martin. Vagamente una pregunta se me cruza por la mente... ¿Que pasa con él? ¿Porque sostiene mi mano?... Él no me quiere...

Los pensamientos desaparecieron cuando vi como los paramédicos y policías lograron abrir la puerta del lado del conductor del coche... Allí estaba mi padre...

Mi madre y yo miramos con horror como poco a poco tiraban de su inmóvil mano. Él estaba golpeado y con cortes, al punto de ser irreconocible, tanto como el destrozado coche. No pude evitar que mis ojos desbordaran con infinidad de lagrimas: su cuerpo esta inmovil y sus ojos cerrados.

No pude evitar dejar escapar un grito. Mi madre me agarra con sus dos brazos y siento como ambos hombros chocan contra los de ellas, ambas estábamos llorando. Por mucho que quiero consolarla, mis brazos cuelgan inmóvil a mis lados.

Observo como un paramédico toca con dos dedos el ensangrentado y magullado cuello de mi padre. Se espera unos momento y luego mira a sus colegas.

"¡Estas inconsciente! ¡Traigan la camilla!"

Apenas oí eso deje escapar el mayor suspiro de alivio en la historia de la humanidad, ni siquiera me detuve a escuchar lo que siguió hablando. Mi madre salio corriendo hacia donde estaba mi padre: a este lo colocaron sobre una camilla y lo subieron a una ambulancia.

Voy corriendo tras ella y agarro su mano mientras me dirijo a la ambulancia. Mis ojos se centraron en mi padre, un medico choca suavemente mi codo.

"¿Que?" Pregunto, dándome la vuelta.

El medico en realidad resulta ser Martin.

"¿A donde vas?" Pregunto él con preocupación en sus ojos.

"¿Donde crees que voy?" 

"Cariño, solo puede ir una persona con él" Susurro mi madre, su voz sonaba temblorosa.

"¿Que?"

"Vamos. Vamos a tomar tu m..." Miro con atención a Martin y este replantea lo que iba a decir "Vamos en tu coche. Yo conduciré."

"Esta bien, no hay otra opción. Yo conduzco." Abrazo a mi madre y me alejo. 

Camino hacia el otro lado de la calle mientras veo como los médicos cierran las puertas y se marchan con las sirenas a todo volumen.

"Dame las llaves" Pide Martin en silencio.

"La ultima vez que pediste las llaves no fue nada bueno. Es una mala idea." Lo empujo lejos de mi.

"Acabo de salvar tu maldita vida por segunda vez en 24 horas. Dame las llames" Exige él, su estado de animo realmente cambia rápido.

Suspire, me duele la cabeza y hasta los pies. Realmente estoy agotada, ha ocurrido demasiado para solo una mañana. Le lanzo las llaves y camino hasta llegar.

"Eres malditamente irritante" Se queja Martin.

***

"¿Familia Lorden?" Pregunta un medico sosteniendo unos papeles.

"Aqui. Nosotros." Responde mi madre saltando de su asiento. Su voz estaba temblorosa, parecia querer llorar.

"Sus signos vitales son preocupante por el momento, pero esta con medicacion. Él estara bien, solo sufrio heridas leves: se fracturo el hueso peroné, el cual sanara en uno o dos meses. Ademas de ello, le estamos haciendo estudios" Dice el doctor con calma.

"¿Cuanto tiempo tiene que quedarse aquí? ¿Podemos verlo?"

"Una semana, o quizás dos. Depende como reacciona a la medicación. Solo puede verlo su familia mas cercana" Dijo mientras mientras asiente con la cabeza y comienza a dirigirnos a mi y mi madre a través del pasillo. Mire hacia atrás y Martin quien se quedo solo, se dirigió a la maquina de café.

Entramos en el frió cuarto azul. Mi padre estaba en una cama con varias maquinas y tubos conectados a él. Mi madre jadea antes de correr hacia su lado y tomar asiento en una silla horriblemente amarilla.

"John..." Susurra ella en voz baja y la primera lagrima cae.

Tome asiento frente a ella. Nunca me han agradad los hospitales y me siento incomoda como nunca antes. Cruce mis brazos y comencé a mosdisquear mi uña del dedo pulgar, habito que pensé haber dejado.

"Lo siento. Lo siento por lo que..." Ella dijo y mi cabeza se mueve bruscamente hacia arriba... ¿Perdón porque?

"¿Mamá?"

Cierra los ojos antes de dejar escapar un tembloroso suspiro.

"Nosotros... estábamos teniendo..." Susurro, cortando sus palabras "Una discusión... Era una tontería... Yo solo..." Sus lagrimas caían de sus ojos constantemente.

¿Pelearon? ¿Acerca de que? En realidad nunca he sido testigo de ver a mis padres pelear o si quiera discutir sobre algo. Simplemente nunca lo habían hecho, bueno, al menos no delante de mi hermano y yo.

"Esta bien, mamá" Digo sin convicción, mi voz sonaba quejumbrosa.

Ella no respondió, solo cerro sus ojos y apoyo su cabeza sobre la cama. Después de aproximadamente dos horas, el medico, cuyo nombre aparentemente es DR. Gilson, abre la puerta mirándonos.

"¿Sra. Lorden?

Mi madre levanta su cabeza, soltando la mano de mi padre. Sus ojos lucia rojos e hinchados de tanto haber llorado.

"Un miembro de la familia puede quedarse esta noche, si desea..."

"Me quedare... Zoe vas a estar bien, ¿Verdad?" Dice ella, su voz sonaba tensa.