Billie {Michael Clifford}

Día 98

—Ay, Dios Santo, esto sí que es la vida.

Michael se recostó en un inflable que estaba sobre la piscina. Los cuatro integrantes de 5 Seconds Of Summer estaban disfrutando del agua y el aire puro, un buen descanso. Les agradaba demasiado aprovechar el trabajo como si fueran unas pequeñas vacaciones. Hacía mucho que ninguno se ponía un traje de baño, ese día estaba espectacular para refrescarse. Habían regresado a Australia, contentos de estar en casa de nuevo aunque tenían conciertos que dar alrededor del país. Apenas habían llegado el día anterior.

—Podría quedarme aquí todo el día. —dice Calum mientras sacaba la cabeza del agua— Como extrañaba el calor.

—Sí, yo también. —Luke se recostó en una reposera— También necesitaba un descanso.

—Hogar, dulce hogar. —mencionó Ashton que estaba sentado en las escaleras de la piscina— Chicos, ¿les parece ir a un club esta noche?

—Yo me apunto. —dijo Calum sin pensarlo dos veces.

—Yo también, tengo ganas de salir. —dice Luke poniéndose las gafas de sol.

—¿Y tú, Michael? —Ashton preguntó al chico que seguía boca arriba del inflable.

—Sí, yo también voy, es obvia la respuesta. —Michael sonrió para sí mismo y Calum se acercó a él para que chocaran los puños.

Calum y Michael eran como el equipo perfecto en las salidas. Justamente, Michael estaba de muy buen humor y esa era la noche para volver a lo de siempre. Alcohol, mujeres y sexo, ya la tenían acumulada de hace unos cuantos días, era su momento de divertirse de la manera que a ellos les gustaba.

La noche llegó bastante rápido y los cuatro se prepararon para salir. Los cuatro salieron solos, sin mujeres, solo los muchachos. Tenían pensado embriagarse y hacer de las suyas, Australia tenía mujeres muy bellas y nada se comparaba con las chicas de la casa. Empezaron a tomar en la casa de Ashton porque tenían que hacer una clase de previa antes de ir, para eso invitaron a algunos amigos, esa noche era salida de chicos e iban a hacer como en los viejos tiempos. Ahora eran nueve chicos yendo a un boliche en el que no cualquiera podía entrar, tenían entrada vip y eso significaba que tenían un par de consumiciones gratis.

Después de bailar como locos y tomar como unos condenados, Calum estaba tratando de ligar en un grupo de chicas que le parecía ir bastante bien, Ashton, Luke, y un par de amigos más hacían competencias de tragos mientras festejaban como locos y Michael estaba en un rincón comiéndole la boca a una morocha, ni siquiera se acordaba su nombre pero estaba entrando en calor aunque no podía irse del boliche porque prometieron volver todos juntos. No se le ocurrió mejor opción que ir al baño y hacer lo que tantas ganas tenía de hacer. No era lo más cómodo pero tenía que satisfacer sus necesidades. La cabeza le daba tres millones de vueltas, había tomado como nunca. Después de terminar tomó su camino y fue a buscar a Calum pero no lo encontró. Fue hacia Luke que de suerte se podía mantener y él al darse vuelta y ver a su amigo con el cabello rojo sonrió como un idiota.

—¡Michael, aquí estás! —dice con una felicidad terrible, como si no lo viera hace años.

—Oh, viejo, alto pedo. —Michael lanzó una carcajada y Luke lo acompaño.

—Esto está genial, hacía mucho que no tomaba tanto. —dice volviendo a tambalearse— ¿En dónde estabas?

—Echándome un polvo en el baño, ¿y tú? —Michael se seguía riendo. Era gracioso ver a Luke en ese estado, era al que más fuerte le pegaba de los cuatro.

—Genial, yo estaba ganando la competencia de shots. —dijo levantando ambas manos como si fuera un campeón.

—¿Sabes dónde está Calum? —preguntó cerca de su oído, la música estaba bastante fuerte.