Pues como empezar... Yo era un señor ya grande con mis 86 años, tenía una esposa, pero lamentablemente murió, tengo una hija llamada Kenia, Kenia tenia un esposo, se amaban tanto que decidieron traer a dos niños al mundo, mis nietos: Tomás y Mariel, lamentablemente el muchacho dejó a mi querida hija. Desde ese entonces me prometí a mi mismo no volver a dejar que alguien le hiciera daño a mi pequeña, al fin y al cabo era mi casa la que habitaban, más no crean que Kenia es mantenida, ella es una mujer independiente y muy trabajadora, tanto así que ella se hace cargo de pagar algunas cuentas de la casa, y hacer el que hacer, ya que a mi edad, yo no puedo.
Para mi desgracia, un nuevo joven llegó a la vida de mi hija, su nombre: Antonio... Ese sinvergüenza, bueno para nada no terminó siquiera su carrera, y le pide dinero mi hija, cosa que me molesta muchísimo, por que lo que pide no es poco, y mi hija no es un banco de prestamos.
Siempre que veo a ese hombre entrar a la casa, me llega una sensación de escalofríos, pero no por temor, si no por rabia. He llegado a llamarle la atención miles de veces, tanto así que hasta yo me harto, pero eso sí, he de admitir que siempre acata las ordenes y las entiende a la perfección, mis nietos Tomás y Mariel tenían apenas 4 meses de edad, esas criaturas como dan ternura, creo yo, tendrán un gran futuro... Si mi hija consigue un esposo decente, claro está.
Decidí hablar con mi hija del asunto, y como era de esperarse, se enfadó conmigo, diciéndome que ese hombre era bueno, y defendiéndolo siempre, mi hija siempre ha sido así de aferrada, pero de tal palo, tal astilla, así que se retiro de mi habitación muy molesta, azotó la puerta...
Y de repente dolor muy intenso apareció en mi corazón...
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Una Lección De Vida
Ficción GeneralUn hombre anciano, muy celoso de su yerno termina aprendiendo una gran lección. Esta solo es una historia pequeña, por lo tanto los capítulos no contendrán tantas palabras (Alrededor de 500 por capitulo, mas o menos)
