Dia SEIS

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Esta mañana, volvió a llover.
En días como estos, amaba tocar el piano, todavía lo hago. ¿Te gustaría oírme tocando?
Mi nieta Emily junto con un amigo suyo salieron a jugar bajo la lluvia.
Si los hubieras visto, te reirías tanto de ellos.
Se parecían a nosotros, cuando te obligue a bailar bajo la llovizna de aquel otoño.
Esa fotografía fue perfecta.
-No te dije lo buena bailarina que eras, desde ese día, comencé amar los días lluviosos.
Pero hoy la lluvia, solo es el llanto de mi corazón que no ha cesado.
La vida nos termino bailando.
Debimos bailar más seguido.

100 Cosas que no te dije.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora