f i v e

13.6K 401 92
                                    

Notaba las yemas de los dedos de Harry apartar los mechones de pelo que viajaban a mi cara, acariciándola. De vez en cuando me daba el lujo de verle gemir y por alguna razón desconocida mis pulmones se cerraban y yo tenía que poner esfuerzo en no imitarle. En ocasiones sus caderas se movían, justo cuando su respiración temblaba y notaba como los músculos de su abdomen se contraían; Ahora no pensaba en otra cosa más que en él. Su cuerpo, sus gemidos, su respiración.

Si esto es un sueño quiero ser la bella durmiente, y no precisamente por lo de bella.

—Mierda preciosa...—jadea pasando su mano por mi pelo, para seguidamente apartar mi cabeza—abre la boca—.

Obedezco y noto el brillo en los ojos de Harry debido a mi sumisión, agarra mi mentón de forma tosca y traza de la misma forma la silueta de mi labio inferior.

—Lo estás haciendo muy bien—susurra como si fuese un secreto acercándose—Lo que más me gusta es como estás temblando de nuevo—vuelve a su posición y mete dos dedos lentamente en mi boca los cuáles yo por inercia acepto—No voy a ordenarte que hagas que me venga, aún. Quiero darte mucho más placer antes cariño...—sonríe poniéndose los bóxers de nuevo y yo noto el gran bulto del mismo.

Se levanta apartando su propia melena y su orden deja en claro lo que va a suceder:

—Acuéstate en la cama y abre las piernas—pensé en que iba a hacer algo como lo de antes pero sus palabras frenaron mis pensamientos—papi quiere correrse viendo como te tocas—.

La sola idea produjo el ya a estas alturas conocido latigazo en mi intimidad, respiré hondo cuando abrí mis piernas más no estaba preparada para el azote de Harry en toda mi extensión. Aunque fue una explosión en mi interior él disfrutaba verme sufrir en silencio por más, así que me manejé por mi misma y ví como papi gruñía mirando y oliendo mi coño en el proceso causando una ola de electricidad palpitante en toda mi columna vertebral.

—Tan mojada para papi...—sus manos bajaron a sus bóxers, y yo alimentaba mi vista mientras aumentaba la presión en mi mano; podía ver completamente su torso tintado y sudoroso que lo hacía ver malditamente caliente.

Apoya su antebrazo derecho al lado de mi cabeza, y el sonido de nuestros labios hace eco en la habitación. Gimoteo en sus labios mientras apoyo una mano a su costado, seguramente dejando rastro de mis uñas al sentir como Harry encaja de manera violenta nuestras pelvis, sintiendo la tela humediéndose.

—Papi...—jadeo y muevo las caderas besándole con voluntad, intentando callar mis propios jadeos.

—Cambio de planes cariño—juego con mi clítoris y oigo como jadea—voy a ser yo el único que te de placer—aparta mi mano y recibo otra embestida—¿Entendido?—

Un suspiro en un intento de afirmación fue lo único que mis labios fueron capaces de pronunciar, y de alguna forma la fricción entre nuestros cuerpos se volvieron más placenteras y profundas.

—¿Entendido?—volvió a preguntar con una voz más profunda, y yo sabía aun cegada de placer, que sus ojos estarían oscuros nublados por la lujuria.

—Sí...—

—¿Sí, qué?—

—Sí, papi—sentía como estaba cerca de llegar al orgasmo y no pude evitar buscar los labios de Harry con urgencia.

Apretó con sus dientes mi cuello, para luego lamer con lentitud mis labios y sentir nuestra falta de aire pero a la vez nuestra ansia por el otro. Poco fueron los segundos que pasaron hasta que mi cuerpo ya no fue capaz de reaccionar más y mi garganta no pudo contener más los jadeos; las estocadas se descontrolaban poco a poco al igual que nuestro volumen. Solo quedaron dos cuerpos exhaustos y cansados enredados entre sí una vez todo terminó y sabía lo adolorida que iba a estar al día siguiente.

| SPANK ME DADDY | h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora