Siempre estábamos juntos y disfrutaba los pequeños momentos con él. La primera vez que lo vi estaba jugando con mi perro en la puerta de su casa y estaba sonriendo. No entendía el porqué mi corazón se aceleró al ver esa sonrisa. ¿Porque todo se iluminó por un momento? ¿Por qué no podía dejar de observarlo? ¿Por qué el simple hecho de verlo me daba ganas de sonreír?
Poco a poco nos fuimos conociendo, nos hicimos amigos. Luego de eso no podía quitarlo de mi mente. Estaba en mis sueños, estaba en mi vida. Entonces lo descubrí: me había enamorado de él desde el primer momento en que lo vi.
Lo que sentía por él era amor...
Me sentía enfermo, él era un niño. Un joven que apenas superaba los 20 años, cabello oscuro, ojos cafés, tez blanca. Y yo, un hombre de 33 años tranquilamente podía ser su hermano mayor pero no lo era. Era algo peor, era su profesor. Aun así no me importaba nada. Lo quería.
Y luego lo arruine todo confesando mis sentimientos Estaba completamente enamorado cuando me rechazó. Sabía que estaba viendo a alguien, que se estaba enamorando de otro, sabía perfectamente que no me iba a aceptar pero no podía callarlo. Puse en juego mi carrera, nuestra amistad, quise confundirlo, quise que me elija pero fracasé en diversas ocasiones. No podía tenerlo, no iba a ser mío aunque lo deseara.
Había arruinado la amistad que teníamos y aunque no me lo dijera sabía perfectamente que nada volvería a ser igual. Él insistía en que volvamos a ser como éramos antes pero aunque quisiera no podía. Cada vez que me veía, muy profundo, en su mirada solo podía ver una cosa: lastima. Sentía lastima de mí y aun así intentaba entrar en su corazón. Aun seguía enamorado de él. Era como chocarme contra la pared constantemente. Una y otra vez. Tenía que rendirme.
Me dijo que encontraría a alguien más, alguien que volvería a hacer latir mi corazón como él lo hizo. Incluso más. No le creí.
Hasta que un día ese alguien apareció y lo imposible surgió.
...
Él es alguien imposible que de pronto apareció en mi vida.
No soy alguien que le guste estar cerca de las personas pero con él es distinto. No entiendo porque insiste en llamarme "el chico del café" si tengo un nombre. Aunque en cierta forma me agrada que me llame así porque es él quien lo hace.
Es una persona extraña, se esfuerza por mostrarse feliz pero por dentro no lo es. O por lo menos eso es lo que expresan sus ojos. Una tristeza profunda tal vez de un amor no correspondido.
No entiendo porque cuando lo veo algo en mi pulso se acelera pero mas lo hace cuando sonríe. No se que es lo que me pasa pero quiero verlo sonreír...quiero verlo sonreír de verdad aunque eso parezca imposible...
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Imposible
RomanceUn derivado de "Esto es Amor?" espero que lo disfruten. Estaba completamente enamorado cuando me rechazó... Me dijo que encontraría a alguien más. No le creí... Hasta que un día alguien apareció y lo imposible surgió... ... Él es alguien imposible...