Capítulo 19

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¿Qué regalarle de cumpleaños a tu mejor amiga de toda la vida, la cual se mudó a más de 1000km de distancia de donde vives, hizo nuevos amigos, se alejó de ti y ahora volvió otra vez?

Di una vuelta en la silla de mi escritorio y luego me levanté con un saltito.

Había estado sentada por un largo rato con un lápiz en la mano y una hoja de cuaderno en frente, esperando a que aparezca mi imaginación para poder pensar en algo para darle a Isabel por su décimo sexto cumpleaños.

Terminé con la hoja llena de garabatos de ojos, figuras geométricas sin sentido, y rayones de lápiz, pero sin ninguna idea sobre el regalo, así que al final decidí ir a buscar algo para comer.

- ¿Tienes alguna idea de qué regalarle a Isa? – Pregunté/grité desde la cocina para que me escuchara mi madre, que estaba sentada en el sofá leyendo.

- ¿Qué?

Agarré un pedazo de pan, un cuchillo, y la manteca de la heladera, y me senté en la mesa.

- El cumpleaños de Isabel es dentro de poco, y no sé que regalarle – Dije.

- Ah, no sé – Dejó el marca-páginas en la hoja donde estaba, cerró el libro y me miró – ¿Qué le gusta?

- No sé bien, o sea, capaz que sus gustos cambiaron.

- Bueno, así queda difícil la cosa.

Le di una mordida a mi pan con manteca.

- Siempre te gustaron las manualidades y esas cosas, ¿por qué no le haces algo?

Lo pensé, en realidad no era mala idea. Sería una buena manera de demonstrar que todavía me importa, y que no he olvidado nuestra amistad.

- Si, tienes razón, pero ahora no sé qué hacerle.

- Ahí ya no sé. Si alguno de tus amigos le va a dar algo, puedes ver con ellos a ver si te dan alguna idea.

Lo creía improbable, pero le agradecí, y le di otra mordida a mi pan.


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Camichota: Perdón, te hablé re mal el otro día

allison: No pasa nada, sé que estabas enojada

Camichota: Es que me da una bronca boluda

                          Y sé que solo estabas intentando que yo me sintiera mejor así que posta, perdón

allison: Tranqui, no pasó nada

                 Como estás?

Camichota: Bastante mejor, creo que hoy le dan de alta a mi hermano así que más tranquila supongo, ahora que se va a casa

allison: Ah bueno, me alegro

Camichota: Gracias

                           Y gracias por apoyarme con todo esto, la verdad que me ayudaste muchísimo

allison: No es nada, sabes que estoy siempre acá cualquier cosa

Camichota: Si, ya se, y a eso lo aprecio un montón

                          También podés contar conmigo siempre, que lo sepas

allison: Ay te quiero mucho

Camichota: Yo más beba <3

                          Ahora me voy a dormir, que ya pasaron de la 1 de la mañana y me tengo que despertar temprano para clases 

allison: Dale yo también, mañana hablamos

Camichota: Ok, buenas noches <3

allison: Buenas noches <3


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- Así que... ¿Hablaste con Isabel? – Preguntó Bruno en voz baja.

Asentí con la cabeza.

- Y ¿cómo te fue?

- Bien – Sonreí – Bastante bien, en realidad. Si no fuera por ti creo que nunca le hubiera hablado, así que gracias, supongo.

Sonrió.

- De nada, ¿qué cuenta?

- El sábado que viene es su cumpleaños, quiero hacerle algo, pero no tengo la menor idea de qué.

- Ah, ¿así que ahora eres Allison manualidades?

Me reí.

- En serio, estúpido...

- Allison y Bruno – Interrumpió la profesora de matemáticas – Cuando armé las duplas los junté pensando que iban a trabajar, pero por lo visto están en una conversación bastante interesante.

Toda la clase rió, y pude sentir el calor subir por mis mejillas.

- No...

- Ya terminamos, profe – Me interrumpió Bruno, agarrando mi cuaderno y levantándolo para mostrárselo a la profesora.

- ¿Si? – Frunció el ceño – Después voy a querer ver ese trabajo, y espero que no tenga muchos errores – Levantó las cejas y se dirigió hacia el resto de la clase – Tienen 10 minutos para terminar los ejercicios, y los que ya terminaron quédense en silencio – Puso su mirada sobre nosotros otra vez - que desconcentran a los demás compañeros.

Cuando todos volvieron a lo que estaban haciendo, Bruno me miró y sonreímos.

Abrí mi cuaderno y arranqué una hoja.

"Piensas terminar el trabajo?" Escribí, le pasé la hoja, y luego me incliné sobre él para leer lo que escribía.

"Nope" Miró su reloj "Esta clase termina en 5 minutos, así que no le va a dar tiempo de corregir y el trabajo va a quedar para hacer en casa"

Sonreí.


- ¿Así que alguna idea para lo de Isa? – Susurré lo más bajo (y entendible) que podía

- ¿Y si le haces algo con fotos? Digo, un collage, un álbum, no sé, algo así.

Puse el codo sobre la mesa y me apoyé en mi mano.

- Me gusta la idea, eh.

Bruno levantó los hombros y sonrió.

- Es mi inteligencia.

- La cagaste – Dije dándole un empujoncito.

Él sonrió por un momento y luego cerró la boca, haciéndome una señal con los ojos para mostrarme que la profesora nos miraba.

Unos segundos después sonó el timbre.

- Bueno, parece que hoy decidieron sacarnos un poco más temprano - Dijo con una sonrisa que me contagió en seguida.

- Quienes no terminaron los ejercicios de hoy, pueden hacerlos como tarea domiciliaria y entregarlos en la clase que viene, sin falta – La profesora recogió sus cosas – Pueden salir, que pasen bien.

Bruno me miró e hizo una seña con la cabeza, como un "te lo dije" silencioso. Me reí, y salimos.



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