La Leyenda Más Antigua. [Magia, Acción, Aventura.]

Capítulo 2. Autoproclamada prometida

En el poblado los 7 recién llegados miraron todo serios, fijaron su vista en los hombres que intentaban subir a las mujeres al carro, ninguno podía creer lo que vio.

Esos sujetos solamente al llegar eliminaron un escuadrón completo.
Todos estaban quietos y esperando a que alguien hiciera el primer movimiento.

Toda esperanza para los sujetos se fue al caño cuando uno refiriéndose a Leona dijo...
-mira esa belleza, cuando mate a sus amigos la convertire en mi zorra personal-

Todos los compañeros de la pelirroja se golpearon la frente con la mano, conocían el carácter de su amiga y cuando se la insultaba... no era bueno para nadie.

Leona gruño enojada mostrando los colmillos que se podía jurar crecieron un poco, cual animal a su presa saltó hacia el sujeto que la insulto y a mano limpia comenzó a despedazarlo, la carne y la sangre volaba junto con los gritos de agonia aterrorizado a los demás bandidos que no podían creer lo que veían.

De un momento a otro los gritos callaron cuando con sus garras, pues ya no tenía uñas sino garras, llegaron y desplazaron su corazón y sus pulmones.
Se levantó con sus garras manchadas de sangre y una demoníaca sonrisa en su rostro...
-quien sigue?- pregunto con voz ronca y distorsionada .

Los hombres contrario a lo que les dijo su instinto atacaron de frente confiando en su superioridad numerica... gravísimo error.

En cuanto cuatro estuvieron lo suficientemente cerca cayeron, retorciendose de dolor, con el cuello arrancado y las faringes a plena vista... más de uno sintió náuseas por esto jamás vieron una imagen tan grotesca.

Los demás cazadores estaban quietos en su lugar todos estaban conscientes de la... condición y el carácter de la pelirroja, sabían que no era sensato meterse en su camino.

-Dispersence ... hay mas personas que necesitan ayuda...-

-Si- respondieron a coro llenado en ayuda de los pobladores.

Ikke corrió acia el sur del pueblo por una calle principal matando con su magia a todo bandido que se cruzara en su camino, dejando tras el un rastro de cadáveres incinerados.

Doblando en una esquina chocó de frente contra un corpulento hombre con más de dos metros de alto.
Este miró a Ikke como si fuera un insignificante insecto y solo funcio el ceño al ver a las decenas de cadáveres que había tras el.

Sin perder tiempo Ikke lanzó una estocada con su bastón, aún desde el suelo, que el bandido esquivó saltando hacia atrás.
Esto dio tiempo a Ikke para levantarse.

-No creas que soy tan idiota como mis hombres...- dijo mirando seriamente a Ik.
-Se que para utilizar la magia necesitas dos cosas, una fuente de energía mágica y un objeto para darle forma a la energía. Ese báculo le da forma a tu magia, si no puedes golpearme con ese palo tuyo no me quemaré.-
Dijo con experiencia haciendo que Ik se pusiera muy serio.

Comenzaron una batalla de esgrima, la espada contra el báculo.
Ambos se movían muy bien.

Ikke dio un corte lateral que fue bloqueado fácilmente, se movía como un samurai buscando una pequeña abertura en la defensa de su oponente, listo para atacar en todo momento.

En cambio el bandido se movía como un esgrimida profecional, movimientos muy finos y precisos que aprovechaban la más mínima abertura en el oponente. Algo muy impresionante viniendo de un mastodonte de 2,17 metros.

-¡Capitán!- gritó alguien desde atrás del mastodonte.
El grito fue una distracción mínima pero suficiente como para que Ikke golpeara el pecho del hombre con su bastón y este empresaria a gritar, sólo en 10 segundos el cuerpo ahora sin vida del hombre cayó al suelo totalmente quemado.