Dolida

37 7 0
                                    

Corro rápidamente al baño mirándome. Me quedo muda, mi boca se abre a los extremos de la sorpresa.

-¿Ahora si me vas a decir que paso?-  estaba parada en el borde de la puerta con los brazos cruzados. -Tu hermano dijo que viene mañana a verte, si te ve así te va a ir mal.

Mi cabello es de color rubio cuando era café, tengo más marcas en el pecho y cuello desde purpuras hasta rojas claras, uno de mis labios está roto y parece que he perdido peso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mi cabello es de color rubio cuando era café, tengo más marcas en el pecho y cuello desde purpuras hasta rojas claras, uno de mis labios está roto y parece que he perdido peso. No quiero verme de esta manera tan... Detestable, Astrid toma una de mis manos y me guía hasta la sala sentándome en uno de los sillones. Al sentarme siento un gran dolor en el trasero por lo que emito un quejido, si mi hermano se llega a enterar algo realmente malo sucedería.

Suspiro agachando la mirada -Cuando serví la cena, no le gustó y arrojó el plato a la pared, me tiró encima de los vidrios rayándome un poco-  le mostré las marcas de las manos y rodillas, unas pequeñas gotas salen de mis ojos -Después me llevo al cuarto, me amarró a la cama y tuvimos sexo. Cuando terminó se alistó para salir y me jaló del cabello para decirme que no era de nadie más-  hice una pausa, me era difícil decirlo, pero mi amiga había escuchado estas cosas varias veces -Luego, un chico se me presentó a la puerta y me dijo que era mi vecino de enfrente, de allí llego Tayler por el ascensor, me presentaron a otro chico. A Tayler no le gustó, cuando volvimos a entrar al departamento me arrojó sobre una pared y me hizo tomar unas pastillas-  ahora que lo pienso - De allí no recuerdo más- nada terminé de decir.

-¿Sabes de que eran las pastillas?-  me pregunta tocándose las sienes.

-No, solo me sentí aturdida y no recuerdo más nada y es verdad - ¿En realidad han pasado tres días?

-Sí esto me intriga- ¿Cómo puedo no acordarme de nada? ¿Qué sucedió? suspira y me mira -Esto va de mal en peor, no pensé que llegaran a estos extremos, ¿No deberías pensar en dejarlo ahora? Mira como te ha dejado.

-No sé - no tengo el valor

Se levanta y sus ojos denotan tristeza -Si no lo quieres hacer, no te obligaré, pero piénsalo bien por favor, no dejes que esto llegue a más-  me toca el labio donde tengo la herida -Ahora debemos tapar las marcas de lo que sucedió antes de que tu hermano las vea-  me dice.

Asiento ligeramente, mi mejor amiga Astrid, siempre ha sido tan buena conmigo. Es la único al corriente de mi situación que me comprende como si fuera mi hermana. Trabaja en la misma empresa que Tayler y sabe todo acerca de él también. Me ha ayudado como soporte muchas veces, la quiero demasiado, al igual es la única con quien mi novio me deja salir, incluso tiene una copia de la llave del departamento como un motivo de confianza.

De su bolso saca maquillajes y cremas, demora un poco más de diez minutos cuando me dice que estoy lista y me pone unos lentes oscuros para que no se me vean las marcas por haber llorado -Ven, salgamos un rato, Tayler me dio la tarde libre-  sonríe cálidamente y me toma de la mano, asiento sonriendo, aun me duele el cuerpo pero lo puedo soportar por un poco de diversión.

Soy una cobardeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora