Capítulo XII

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Antonella POV

Hija, Nicolás está abajo, dice que van a ir a una fiesta – me dijo mamá desde la puerta de mi habitación.

Suspire – si mamá, iremos a una fiesta – me miró con su típica cara de "¿Por qué vas si no quieres ir?". A ella nunca le gusto Nicolás pero bueno, es lo que toco – ya bajo, dile que me espere 5 minutos.

Está bien hija, ya le digo – se fue. Me mire en el espejo una vez más, creo que me veo bien. Me puse un crop top blanco de encaje, una falda acampanada negra y unos tacones no muy altos por las dudas. Suelo ser un poco torpe y no quiero ser el numerito de esta noche.

Baje de inmediato, no quería hacer esperar a Nicolás mucho más. A veces se pone un poco irritante cuando demoro mucho.

Hola amor, te ves hermosa – me dijo mientras me daba un beso en los labios. Me repugno pero bueno tenía que fingir claro está.

Hola Nico, ¿ya nos vamos? – le pregunté evitando el cumplido que me había hecho.

Si preciosa, claro – me tomo de la mano y salimos de casa.

Era un trayecto corto y sumado al Ferrari de Nicolás aún más. La casa de Ana quedaba a 10 minutos de mi casa por lo tanto llegamos muy pronto.

Cuando entramos había un olor asqueroso a porro y alcohol. Nicolás se fue con sus amigos dejándome sola por unos minutos hasta que encontré a Anna hablando con Mara. Anna tenía un porro en una mano y en la otra un vaso de vodka. Odio el alcohol, las drogas, los cigarrillos, todo ese tipo de cosas que hacen que te mueras más pronto de lo que deberías. Pero Anna era diferente, a ella le encantaban esas cosas. A veces pienso que lo hacía para llamar la atención, pero no la culpo.

Hola amiga – le dije cuando llegué hasta ella, evitando saludar a Mara que me miraba de arriba a abajo de una forma muy... ¿deseosa? Estas alucinando Antonella, deja esos pensamientos.

Oh hola Anto, ¿viniste sola? – me pregunto, el olor a alcohol salía de su boca.

No, vine con Nicolás pero se fue con sus amigos, ya sabes cómo es él – le contesté mientras miraba a Leticia que iba entrando con su mejor amiga. Llevaba puesto un vestido azul con encaje negro y unos tacones realmente altos. Esta preciosa.

Sisi lo sé – me dijo mientras fumaba un poco.

Oigan ¿vieron quien acaba de entrar? – dijo Mara

Oh miren es Lett – contestó Anna. ¿Desde cuándo tanta confianza?

Toda la pista de baile se dio vuelta a observarla, los celos me consumieron y me fui para afuera. ¿Por qué tenía que ser tan hermosa? ¿Por qué todos tenían que mirarla así? Desearía ser yo quien la mirara y admirara siempre, desearía que me amara como yo la amo...

Nicolás llegó y me sacó de mis pensamientos. Me agarro del brazo y me llevó a la pista. Supongo que quería bailar.

No estaba equivocada, se movía violentamente apoyándome su miembro en mi trasero. Pude notar que se estaba poniendo duro. Genial, ahora tendría que ir a tener sexo con él.

Quiso llevarme arriba pero yo no quise, empezó a cincharme y me apretaba el brazo muy fuerte. Decidí que ya era suficiente de esta tortura, después de ver a Leticia me di cuenta que la amo y que debo luchar por su amor. Yo no amo a Nicolás, ni siquiera lo quiero. No pienso aguantar más de sus malditos abusos. Pero para mi suerte estaba borracho y por resistirme a ir donde él quería seguramente me costaría caro, pero no me importaba. Comenzó a insultarme y me sacudía. Cuando vi su mano en el aire cerré los ojos esperando el golpe, pero nunca llegó... 

Mi amor imposible [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora