Capitulo 2

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Capítulo 2: Gritos ahogados.

-Para que hablar, si habrá alguien quien nos silenciara-.

Ya han pasado dos días desde aquel suceso extraño en la plaza... En estos días me he sentido incomoda, he tenido sueños y pesadillas de los más extraños... Voces que me susurraban cosas horribles... Desde que traje esa carta a la casa, el entorno alrededor de mí se ha vuelto espeluznante. He visto sombras por el corredor, he tenido la sensación de gente observándome... Me siento inquieta.

No ha pasado más que nada encerrada en su cuarto leyendo libros sobre lecturas paranormales, o en tal caso mirando el cielo todos los días... Observando en aquel entorno lo desconocido. Una noche, cuando la oscuridad se encontraba presente, Alicia abrió sus ojos en la mitad de la madrugada, intentando observar alrededor de ella, se paró de la cama y se sentó en el frío piso, abrió las cortinas y se quedó mirando a aquella estrellada noche, constantemente veía a lo lejos una estrella más brillante que otra o una más grande que otra, la tranquilidad no duro mucho hasta que el picaporte comenzó a girar solo, Alicia volteo la mirada hacia la puerta y rápidamente se levantó para prender la lámpara de noche, la puerta se abrió lentamente la tensión aumentaba, y cada momento mi corazón latía más rápido. Paso... Paso... Paso... Crujido. Se escuchaba casa paso por paso y la madera del suelo crujiendo con cada pisada, era como si desatara su furia contra el suelo, Alicia se levantó bruscamente para cerrar la puerta y colocar llave, se quedó encima de la cama mirando atentamente la puerta, paso... Paso, crujido... Cada vez se acercaba más y más a la puerta, el estremecedor sonido del picaporte girando, la luz parpadeaba, y por cada segundo el cuarto quedaba oscuro, cuando en ese momento el pasillo quedo en silencio, no había mas nada... Alicia se empeñó a dormir, cerró los ojos y suspiro, se quedó dormida al rato y volvió a sonar otra vez el picaporte, Alicia no tuvo chance de prender la luz y la puerta ya se encontraba abierta, Alicia quedo a merced de la oscuridad y de un ser extraño dentro de su cuarto. Alicia cerro los ojos sin pensar lo peor que podría pasar, pero ocurrió todo lo contrario, su mente se llenó de horribles criaturas con aspecto fantasmal alrededor de ella, simplemente no logro agarrar coraje para salir de su cobija y ver que era, pero poco a poco algo iba jalando su sabana y jalando hasta descubrir una parte de su pie, misteriosamente un reloj comenzó a sonar "Tic-Toc-Tic-Toc..."

-Q-que raro... yo no tengo relojes en mi cuarto... Sera mejor que prenda la luz."

Alicia encuentra el interruptor de la lámpara de su mesa, y justamente a lado se encuentra un papel, en ella escrita: " El tiempo se acaba y las muertes comienzan, no me queda tiempo". Encima del papel blanco se encontraba una reloj de mano yendo al lado contrario de las agujas normales de un reloj.

-¡No entiendo!, Que se supone que debo hacer?- Exclamo Alicia.

Alicia se recostó en su cama mirando fijamente hacia el techo, pensando y pensando, ¿Cuál sería el propósito de su vida? ¿Cuál será su destino? o ¿Por qué el tiempo se acaba? Sin poder conseguir respuestas claras a sus dudas Alicia suspira profundamente, y cierra los ojos. A la mañana siguiente la nota había desaparecido y solo habia quedado el reloj de mano en la mesa, funcionando normalmente.

-Habrá... Sido un sueño...?-

-Ah...- Suspiro Alicia

-Ahora que debo hacer? Tengo una carta, y un reloj, ¿Que me dice el destino? Que vaya a apostar? No, no, odio apostar... Una carta... Un reloj... Ya sé! El destino me dice que algún día seré una apostadora, y que perderé mi tiempo en eso... Argh! No!...-

-Hija, deberías dejar de hablar contigo misma, se ve muy raro-

-Lo siento mamá, es que estoy confundida-

-¿Confundida de qué?-

-Me temo que yo tampoco lo sé...-

-Bueno, las dudas algún día se responderán solas Hija mía-

-Es cierto! Solo necesito Tiempo!

"Tiempo... Tiempo..."

-Oye Mamá Sabias que ayer... *No puedo pronunciar ninguna palabra ¡¿POR QUE?!-

-Ayer que...?-

-O-olvídalo...-

-Está bien-

*No puedo pronunciar ninguna palabra, Voy a vomitar... Me doy asco, No importa! tengo que averiguar que está pasando*

Alicia salió corriendo, y justamente en ese momento vio una mancha negra corriendo había lo más recóndito del jardín, inmediatamente la pequeña niña siguió los veloces pasos de aquella mancha, hasta encontrarse exhausta, se sentó bajo el mismo árbol de siempre y cayo rendida a ronquidos.

-Me siento encerrada en un cuarto sin salida... Nadie acude a mis gritos, solo... Tú... ¿Qué haces aquí? E-estoy hablando conmigo... misma, debo estar loca!-

-Pues estar loca no es tan malo...-

Esa voz tan serena, la he escuchado antes, pero ¿Donde?

-Que haces aquí?-

-Pues... he venido a sacarte de tu propio abismo- Sonríe levemente

No puedo verle la cara, pero su sonrisa, es tan... hermosa...

-Como...?-

-Con un beso.-

¡OPORELAMORDEMISNUECES! Que fue eso? ... Un... Beso? *suspiro* Fue un sueño... Espera... ¡ESPERAA! Por primera vez no tuve una pesadilla! ... Debería dejar de hablar conmigo misma, no puedo dejar de sonreír, estoy tan feliz.

Alicia se levanta del árbol, y toma el reloj de mano, y lo contempla con admiración.

- Gracias... Seas quien seas-

Mad Wonderland †Donde viven las historias. Descúbrelo ahora