Pero... ¡Es el Padre de Mi Mejor Amiga! |Segunda temporada|

Capítulo 2 Déjame olvidarte

-¿Pero de que hablas Justin?- pregunte asustada

-No soy tonto ______, con la poca ropa que tenia puesta se podía ver a kilómetros los ematomas que tienes.- dijo furioso.

-Yo...yo...eso fue un accidente. - intente justificar

Justin me miro aun mas enojado. Aparco el auto a un lado de la carretera tan deprisa que me golpee con la puerta del auto y se volteo práctica tenerlo de frente.

-¡No te atrevas a mentirme nunca mas y menos por una escoria como esa!- grito a todo pulmón mientras me miraba a los ojos y juro que me hice pequeña.

Sin darme cuenta las lágrimas comenzar a brotar de mis ojos escapándose sin permiso. Intenté buscar las palabras para hablar y sacarme de este problema, mas no las encontraba. Me quedé paralizada mientra el me fulmina va con la mirada e inspeccionaba cada covimiento que hacia. Entonces pareció notar el miedo que invadía mi cuerpo, porque su ceño se fue ablandado dejando un roto de preocupación a su vez. Suspiro pesadamente y me miro con más ternura.

-Dime la verdad, te lo ruego.- dijo y sentí que el corazón se me rompio en mi pedazos

-Justin...yo...yo...es solo que...el y...- suspiré tratando de recuperar las palabras cuando siento que toma mi rastro en sus manos y me da un tierno beso. Al separarse me mira a los ojos haciéndome rederetir.

-Solo dime princesa.- dice en un susurro haciendo que mi piel se erice

-Brad me golpeó anoche, no sabría cuanto fue porque quede inconciente.- una lágrima recorrió mi mejilla y podía ver como su mandíbula se tensava y apretaba su agarre en mi- Lo peor es que tiene una foto de nosotros besándonos, me dijo que si no me alejo de ti se la enseñará a todos....

Justin me soltó y quede mirando la nada por unos largos segundos. Se que debía estar anonadado con la noticia, su rostro lo delataba. No sabía que hacer o si tan siquiera sabia si estuvo bien decirle. Espere un rato mas, al no obtener respuesta tape mi rostro con mis manso para evitar comenzar a sollozar.

-Solo llévame a casa, no nos veremos más y lo resolver con el tiempo.... Déjame olvidarte Justin.- dije junto a un sollozo silencioso

-¿Que? ¡No!- grito isterico y retiro mis manos de mi rostro para que lo mirara. - No dejare que este imbécil se salga con la suya, te dejare en el doctor para que te vea e iré a resolver esto. Tu solo tranquila.- susurro lo último y puso el auto en marcha.

No estoy segura de cuanto tiempo paso, pero llegamos al doctor. Al comienzo me negué completamente a quitarme la ropa para mostrar los golpes, mas tuve que hacerlo. Me hicieron varios estudios para comprobar que todo estuviera bien. El doctor me dio varias indicaciones, consejos y medicinas. En todo ese tiempo Justin solo me miraba y no decia nada. Al poco tiempo ya estábamos de camino a mi casa.

En todo el camino no hable, no sabia de que. Era algo muy vergonzoso saber que no me puedo defender, pero aun peor es ver esa mirada en el rostro de Justin. Es decepción, como si yo tuviera la culpa de todo y aun no lo puede creer. Ni yo lo podía aceptar.

El auto se detuvo indicando que había llegado a mi casa, sin mirar en su dirección. susurre un adiós y baje delas auto. No esperaba respuesta de él, si antes no hablo no creo que lo hiciera ahora. Estaba por abrir la puerta cuando siento un tirón de mi brazo seguido de unos brazos aropandome en un cálido abrazo. Si no conociera tan bien ese perfume estuviera gritando, en cambio sumergí mi rostro en su pecho para poder olerlo mejor.

-Se que es difícil princesa, pero prometo salir de esto. Lo arreglaré todo y podremos volver a ser lo mismo de antes. Te quiero.- susurro junto a mi oreja haciéndome sentir su aliento al chocar con mi piel

-Te quiero.- susurre escapándose me un sollozo silencioso

-¿Quieres quedarte conmigo hoy?- pregunto halando mi rastro con suavidad para que lo mirara a los ojos

-No se si pueda.- dije apenada

-Vamos, le dirás a tu madre que te quedaras con Amber.- dijo como una orden y me aló hacia el auto.

Dentro del auto tuve que sonreir por como actuaba este hombre, el cual me tiene locamente enamorada de el. Lo tuve que mirar para preguntarme en que momento comencé a amarlo con tantas fuerzas. Amaba esa sonrisa compradora, amaba ese flequillo que se le colaba en el rostro tapando esos hermosos ojos avellana, amaba ese cuerpo del infierno, amaba su forma de ser serio y al mismo tiempo gacioso, amaba como podía decir algo en forma de orden o como transformaba los momentos incomodos....simplemente amaba todo de el.

-Juro que si me sigues mirando de esa forma aparcare el auto aqui y te haré el amor.- dijo con voz ronca y provocativas a lo que me dijo jadear de sorpresa.

Rápidamente junte las piernas al sentir mi centro palpitar desviando la mirada a la ventana. ¿Como es posible que de tan solo hablarme ya tenga ese efecto en mi? Este hombre acabara conmigo.