CAPÍTULO 6

439 40 6
                                    

Al salir de la habitación, encontramos miles de pedazos rotos por un jarrón que había caído al suelo, y a Mérida recogiéndolos todos; inmediatamente, me puse a recogerlos con ella, y sin darme cuenta,  toque levemente su mano, pero ella la aparto con un leve sonrojo en su rostro.

-Ah... Lo si-siento, iba pasando y lo tumbe por accidente- se notaba algo nerviosa, ya que no dejaba de pasar uno de sus rizos por detrás de su oreja, así trate de calmarla.

- Tranquila, solo fue un accidente- Levantamos los pedazos mas grandes, y los tiramos a la basura. le pedí a Mérida que fuera a la habitación de los niños, mientras que yo, volvía a la oficina con Jack, para arreglar unas cosas pendientes.

                                                                          (...)
- ¡Estas loco! - Al parecer, a Valka no le había agradado del todo mi decisión de mudarme- apenas se fue Astrid, y tu ¿ya quieres comenzar una nueva vida con esos niños?, ¡Necesitan a una mujer que los sepa educar!- estábamos en su recámara, pero esto sin duda ya me estaba molestando, y si decía otra cosa mas, estallaría.- Además, ¿Qué dirán las personas al respecto?

- Lo se, pero son mis hijos, y no quiero que me vean como un mantenido- Y era verdad, se cumplían casi cuatro meses que estamos aquí, y yo seguía viviendo en casa de mi madre - llevamos mucho tiempo viviendo aquí; lo de Astrid ya paso, y necesito hacer mi vida de nuevo, al lado de mis hijos. Saldremos a delante sin ayuda, y con esto me refiero a la de ella, y la tuya- Dije subiendo el tono de mi voz- Y me importa una mierda lo que piensen las personas al respecto. ¡ES MI VIDA!.

-¡NO USES ESE TONO CONMIGO, NI ESE MALDITO LENGUAJE!- Tal vez si me exedí, quiera o no es mi madre- Mira Hiccup, tu puedes hacer lo que quieras, pero esos niños necesitan educación, y no la tendrán de un hombre que se la pasa mas tiempo en la oficina que en casa.- Sin duda, ella tenia razón, con todo el trabajo que hemos tenido, muy apenas los e visto- Pero... Yo podría aceptar tu decisión, con una condición.

- ¿Cual?

- Mérida podría vivir contigo.

Esperen...¿¡QUE?! ¡¿Una mujer, la cual no es mi novia, (ni mucho menos mi mujer) vivirá conmigo solo por que mi madre cree que no soy capaz de cuidar a mis propios hijos?!

-¡Claro que no!, soy capaz de hacerme responsable de MIS propios hijos, no necesitó de tu ayuda, ni mucho menos de una extraña que viva en mi casa- estaba apunto de salir de la habitación, pero ella me tomo delicadamente del hombro para que yo dejara de avanzar.

- Por favor Hiccup, no exageres, solo que, no quiero que descuides ni la empresa, ni a tus hijos.

Me detuve unos segundos para meditar sus palabras, y después retirarme sin decir nada. En el pasillo estaba Jack, y tenía una amplia sonrisa en el rostro.

-Vamos Hiccup, ¿Qué tiene de malo que Mérida viva contigo? No harán cositas sucias, o ¿si?- A veces, Jack solía hacer comentarios de mal gusto, con los cuales me llegaba a hacer explotar de coraje, o sonrojarme hasta mas no poder (como era el caso)

- ¡Obviamente no! - le grite- No somos absolutamente nada. Además, ¿qué haces tu escuchando lo que no te incumbe? 

Jack, soltó una carcajada, y me tomo del hombro al mismo tiempo en el que negaba con la cabeza -hermano, sabes que tu madre tiene razón, hazlo por tus hijos, por lo que e visto se llevan bien con Mérida, y la conozco desde hace años, cree me que es una persona extraordinaria, y estoy seguro de que cambiará tu vida.

-no lo dudo- me quede pensando un rato la situación, hasta que caí rendido- tiene dos meses para convencerme

-¡¿Le darás una oportunidad?!

-Se podría decir que si

- Cree me, esos dos meses que pasará contigo, estoy seguro de que cambiará tu vida 

-Pues ya lo veremos

[Mericcup] Dos simples amantesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora