Capitulo ocho

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Kristine

Eran las 7 y yo apenas iba a entrar a la ducha, odiaba las fiestas como estas.

El agua caliente de la tina relajaba mis músculos, Tal vez pude ser una chica normal- pensé, sacudí mi cabeza borrando esos pensamientos absurdos, mi vida era perfecta, gracias a Jared estoy viva, como lo extraño.

Salí de la ducha con una toalla enredada en mi cuerpo y otra en mi cabello, seque muy bien cada gota en mi cuerpo y después puse un poco de crema corporal, tome mi ropa interior negra de encaje, también unas medias negras con ligeros, tomo los zapatos de tacón color negro también y me los pongo son altos, me quedan perfecto, camino hacia el tocador, se con mi cabello y lo ondulo un poco lo agarro en forma de que caiga de un solo lado, del otro lo trato de sujetar con unos pequeños pasadores color plata, decido maquillarme, uso un poco de base del color de mi piel, para borrar cualquier rastro de ojeras, pongo rímel en mis ojos y también los delineo con lápiz de ojos, pongo un poco de rubor en mis mejillas y pinto mis labios de un rojo cereza.

Tomo el vestido rojo, largo, ya que es una fiesta de beneficencia, no puedo andar con un vestido corto, según mi abuelo debo mostrar clase.

Lo subo con delicadeza, la puerta se habré dejando ver a Ashley de traje, de verdad se ve realmente guapo, me ayuda a subir el cierre del vestido, tiene un escote que deja ver un poco mi busto, no tengo mucho y la verdad el vestido me ayuda bastante, el vestido es pegado, pero con forme baja hacia mis piernas es un poco suelto, en la parte del escote contiene pequeños diamantes, le sonrío a Ashley desde el espejo, sus ojos chocan con los míos

-Gracias- digo y el sonríe

-Ha sido un placer Kris- dice y besa delicadamente mi hombro, mi piel se eriza un poco

Como quisiera poder estar con el

-Si tu abuelo ve que no estoy abajo va a matarme, te veo en un rato preciosa- dijo y salió de la habitación, tome mi perfume favorito Hallowen y puse un poco en mi cuello, tome mi bolsa de mano negra con incrustaciones de diamantes, ahí llevaba mi IPhone, las llaves de mi auto por si lo necesitaba y una pequeña arma blanca por si algún intruso trataba de atacar hoy, tome mi antifaz de terciopelo negro, con pequeños toques rojos, tenia algunas plumas rojas no muy grandes.

Lo puse en mi rostro y salí de la habitación

Andy

Llegue acompañado de Juliet, todos llevaban antifaces algunos raros otros simples, juliet, llevaba uno de cara completa color turquesa, al igual que su vestido, yo llevaba uno de media cara blanco, como el del fantasma de la opera.

Estábamos en la entrada de la mansión, de hecho toda la gente estaba ahí, en ese momento la vi bajar, llevaba un vestido rojo que dejaba ver su figura muy bien, sus labios eran de un rojo cereza, de veía hermosa, al llegar al ultimo escalón un hombre ya mayor le tendió la mano.

¿quien es el? Me entro la duda, tal vez era el dueño de toda la mafia kobra

El maestro de ceremonias indicó que pasáramos al gran salón, todos caminaron hacia aya, era algo enorme, el piso era de madera, había como mínimo 30 mesas. Juliet y yo caminamos hacia nuestra mesa y para que todo estuviera mejor -Noten el sarcasmo- nuestra mesa era con Kristine Leto, Anthony Leto Hopkyns, Ashley Purdy, Renee  Poenix, Dante Matterazzi, Alexandra Corney y Nick Carter

En la mesa eramos los primeros, aun no llegaban los demás.

En ese momento vi a Kristine acompañada de su abuelo, atrás de ellos venían dos chicos acompañados de 2 chicas

-Buenas noches- dijo el señor, por educación nos. Levantamos de la mesa

-Buenas noches- dijimos Juliet y yo al unísono

-Pero que descortés soy, me llamo Anthony Leto- se presento y estiro la mano, se la tome

-Andrew Biersack y ella es mi prometida Juliet Simms- Juliet le dio la mano al señor

-Ella es mi nieta Kristi

-¡Nick!- chillo ella y corrió a abrazar a un tipo alto rubio y de tes blanca, el la abrazo por la cintura y la levanto del suelo unos instantes

-Ellos son, Ashley, Dante, Renee y Alexa- señaló a cada uno de los que venían atrás de el -Disculpe a mi nieta es un poco rebelde- dijo. El -¿Nos sentamos?- pregunto y todos asentimos, el señor Leto, se sentó enfrente de mi, de su lado izquierdo se sentó El que creo es Ashley y su acompañante, Dante y su acompañante y de lado derecho Kristine y el tal Nick

****

Llevaba la mitad de la velada y ya me sentía arto, El tal Nick no soltaba a Kristine por nada del mundo y yo sentía que tenia ganas de pegarle un puñetazo en la cara cada que se acercaba a susurrarle algo.

Era hora del baile, Juliet había tenido que ir al tocador, así que aproveche la oportunidad

-¿Me harías el honor?- pregunte y le estire la mano a Kristine, ella dudo por un segundo pero acepto de mala gana, el tal Ashley y Nick me fulminaban con la mirada, camine al centro de la pista, tome su cintura con mis dos manos y ella puso las suyas en mis hombros, no quería estar muy pegada a mi, eso se notaba

-¿Que pretendes Biersack?- pregunto secamente.

-Nada- «Alejarte un poco de ese imbecil» pensé, ella no me miraba, incluso la notaba incomoda, después de unos segundos mas me atreví a decir -Lo siento

Ella me miro directo a los ojos

-No tendrías por que- dijo seria, estaba apunto de decirle que me había gustado mucho sus besos cuando el Ken Carter apareció

-Me permites- dijo y tuve que dejarlo bailar con ella

-Hasta pronto oficial- dijo ella y siguió bailando con él

Maldito

Criminal #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora