Capitulo 12

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         Capítulo 12

Por el resto de la mañana nos quedamos a su lado llegada las dos de la tarde me excusé con Richard del por qué tenía que irme.

-Quiero ir.-dijo para mi sorpresa.

-¿Seguro?

-Vayan.-dijo Charles cabizbajo.-Yo estoy aquí.

-Bien, nos llamas cualquier cosa.-dije guiando a Richard hacia mi vehículo.

El silencio nos cortaba las venas, él tenía la mirada fija en la nada en cambio yo no lograba respirar imaginándola en ese estado.

-Aquí es.-dije estacionándome. Bajamos y de inmediato nos dirigimos al interior.

Era un edificio un poco antiguo alguna vez funcionó como centro de compras, tenía salas de cines que estaban totalmente abandonadas.

-Nathan el lugar es perfecto.-dijo Evan frente a nosotros.

-Evan te presento a Richard Matthews mi suegro.

-Hola-se dijeron mutuamente estrechando sus manos.

-¿Tienes una idea de lo que Chris quiere?-pregunté.

-Sí, conversamos de eso.-respondió Richard

-Bien los dejaré un momento. Debo hacer una llamada.

Salí del edificio y llamé a Susan.

-Hola feliz año.

-Igual para ti. Sé que es tu día libre pero necesito tu ayuda con algo.

-Dime.

-Chris me dijo que te solicitó ayuda con la boda.

-Así es, no quiere nada ostentoso Nathan sólo una ceremonia sencilla.

-No descuides ni un detalle, quiero que te comuniques con mi agente de bienes raíces.

-Claro.

-La casa debes de verla con los ojos de madre y esposa. No me recuerdes en nada sólo piensa qué querría ella.

-¿Estás bien?

-Está hospitalizada ¡maldición! No recordaba a Sam.

-Iré a tu edificio y me encargo de eso. Nos vemos luego.-dijo con dulzura.

Regresé al interior para participar del proyecto, no podía sentirme derrotado, no tenía el derecho de creerla perdida. La casa, la boda, la fundación todo eso junto me hacía sentir, creer que no la perdería.

Aportamos ideas, diferentes puntos de vista. Los planos preliminares que Evan diseñó en tan poco tiempo eran los perfectos.

-Quiero conservar las salas de cine.-dije

-¿Seguro? Es terreno que podemos usar.

-Me parece bien.-comentó Richard.

-Evan, son enfermos terminales no quiere decir que no tienen gustos en películas o que dejan de ser fans de algo sólo por estar críticos.-dije con seriedad.

-Puedo saber qué te motiva.

Richard y yo guardamos silencio, él tuvo el valor que yo no tuve.

-Mi hija tiene leucemia.

Evan abrió sus ojos y no lograba hablar, abría la boca en señal que iba a decir algo pero volvía a callar.

-Lo siento.-dijo al fin.

Recuerdos de un Mañana.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora