Habían pasado ya tres días desde aquel descubrimiento que Nagisa, Reika, los STARISH y QUARTET NIGHT habían presenciado.
Pero aún después de haber aceptado estar cerca de Ian, las cosas ya no eran como antes, ella aún no lograba estar cerca de él como antes.
Y eso a él le preocupaba, porque no sabía la razón de su alejamiento.
-¿Has escuchado los rumores? -Preguntó una voz lejana, pero, aún así, audible.- Dicen que un superior entró al high school Course sólo por su prometida.
-¿Ehh? ¿en serio? -Cuestionó otra voz.
-¡Sí!, la chica es una pupila, una Idol, su nombre era.. Tu.... Tuner...no -
-¿Nagisa Turner? -
-¡Sí! ¡esa misma! ¿cómo lo sabías? -
-La he visto un par de veces en los jardines, no parece una chica muy espectacular -Concretó la otra voz, causando el sobresalto de un peliazul que se encontraba a metros de distancia comiendo un pan de melón.- Pero deben quererse mucho, para que él haya querido entrar aquí.
-Sí, ya quisiera yo tener un prometido así -Agregó la primer voz.
Ian estaba inmóvil, sus pensamientos estaban completamente desordenados, no conseguía asimilar lo que estaba escuchando.
"¿Nagisa tiene un prometido?"
-Quizás haya venido a casarse con ella -Finalizó una de las voces.
El sólo escuchar la palabra "casarse", y relacionarla con esa persona, lo perturbó de una forma indescriptible.
Se levantó del asiento en donde estaba y se dispuso a salir del lugar; ya no quería escuchar rumores, porque seguramente eran meras suposiciones infundadas.
Caminó sin rumbo esperando encontrarla, la consideraba una buena amiga, con quien podía expresarse libremente, aunque no totalmente, pero hablar con ella le hacía bien.
Cerca de él, se encontraba Nagisa, en un salón de música, sentada frente al piano, intentando componer la canción que Saotome le ordenó que hiciera, pero la inspiración no le llegaba.
Hizo sonar algunas notas en el instrumento, pero nada la convencía, así que se quedó en silencio un momento.
-Supongo que no funcionará... -Susurró levantándose de su lugar.- Tengo que encontrar la manera de inspirarme, o no podré continuar.
Caminó en dirección a la puerta, mientras revisaba su móvil, buscando fotografías de sus padres, pensando que quizás recordarlos la ayudaría. Pero fue golpeada accidentalmente por alguien que corría por el pasillo.
-¡Lo siento! -Exclamó la persona sin detenerse, la chica golpeó su cabeza contra la pared cayendo al piso por el impacto.
-¡ Alex!, ¡espera! -Pidió una segunda persona que corría en dirección hacia el otro.
-¿Alex?, ay, duele... -Soltó un quejido mientras intentaba levantarse, pero al hacerlo notó que su móvil ya no estaba.- ¡¿Eh?!
Miró a su alrededor buscando el objeto, pero no estaba, notó que frente a ella había una especie de cuarto pequeño, con su puerta entre abierta, que albergaba lo que parecía ser viejos instrumentos, y en el suelo del mismo se hallaba su móvil bajo una estantería, por lo que se dirigió hacia el mismo, empujando levemente la puerta con dificultad.
La misma estaba en mal estado, y la cerradura parecía estar rota, pero no le dio importancia.
-¿Nagisa? -Preguntó una voz masculina.- ¿Qué sucede?.
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El Destino Del Hilo Rojo
Aléatoirelas personas destinadas a conocerse tienen un hilo rojo atado en sus dedos.Este hilo nunca desaparece y permanece constantemente atado, a pesar del tiempo y la distancia. No importa lo que tardes en conocer a esa persona, ni importa el tiempo que pa...