•~#Capitulo 20#~•

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Termine de pagar las papas fritas y volví a subír a la patineta, ha pasado una semana y media desde que estoy aprendiendo a andar sobre ella y he avanzado mucho, ya la utilizo como medio de transporte básicamente

¿Recuerdan la ves que fui a Disneyland con Charlie? Pues ese día como a las 10:00 a.m nos despertamos, caminamos unos 3 km para ir a la gasolinera más cercana, en el trayecto todos nos miraban raro por los disfraces, al llegar nos vendieron la gasolina pero se burlaron mucho de nosotros y no los culpo pues yo también lo habría echo, el camino de regreso fue igual o peor

Pusimos la gasolina en el tanque y volvimos a casa al llegar lo que hice fue prácticamente dormir todo el día

Esta mañana salí a pasear con la patineta como había dicho antes y fui al parque más cercano tarde 30 minutos en llegar, y decidí salir ya que discutí con mi madre como de costumbre por la misma razón de siempre; Jordán

Esta vez no quise llorar y por eso decidí irme para despejarme, aveces me canso de llorar, no creía que era posible pero ahora que lo eh experimentado sé que si lo es

Al llegar ahí había muchas personas de diferentes edades, eso no me interesa sinceramente pero me miraban muy raro supongo es porque no muchas chicas deciden practicar skatebording pero eh aprendido que no importa lo que diga la demás gente, en especial si no te conocen

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Seguí vagando por el centro comercial con mi patineta en una mano y un helado en la otra

Cuando inicia a sonar mi teléfono

Con las dos manos ocupadas no pude reaccionar a tiempo y cuelgan

-Bueno si es importante, llamaran otra vez -me dije a mí misma

Volvió a sonar mi celular y sin cuidado alguno deje caer la patineta ya que ni loca dejaría caer mi helado, aunque algunas personas me miraron mal y soltaron el típico "shh"

-¿Si?

-Kendall hola -respondieron alegre

-Hola Hannah ¿que sucede? -pregunté

-Bueno, estoy aburrida y me puse a pensar que no te eh invitado a una pijamada y bueno, es para eso ¿Quieres venir a una pijamada conmigo?

-Hannah, me encantaría pero...

-Genial -me interrumpió- enseguida te mando mi dirección puedes venir de las 7:00 p.m en adelante ¡Adiós! -colgó-

-Pero... Ahg -dije fastidiada para mí misma

Empecé a caminar de regreso a mi casa ¿Pero y si no me dejan? Será algo difícil escapar a las 7:00 p.m o antes

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Abrí la puerta de mi casa y entre, deje la patineta en la entrada, vacile un poco pero entre a la cocina, encontrándome con mi madre

-Mamá -la llame pero me ignoro- una amiga me invitó a una pijamada ¿te molestaría que yo...?

-¿Fueras? No -me interrumpió ahora mirándome dejando de picar verdura- entre menos tenga que estar contigo y ver tu cara, mejor

Dicho esto volvió a lo que estaba haciendo antes, negué con la cabeza ya que mis ojos amenazaban con llorar así que rápidamente subí las escaleras, al llegar a mi habitación lo único que quería es llorar y cortarme -esto es casi una adición pero lamentablemente no la eh podido dejar aunque tratare- hasta que no hubiera un mañana, pero no lo haré tratare de ser un poco más fuerte...total, ya casi me voy

SuicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora