Capítulo 1

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Antes de conocer a la señora de abajo y al


señor de arriba la vejez nunca me había interesado.


A mis padres no les dio tiempo de hacerse viejos;


mi padre se suicidó muy pronto y mi madre ha


vuelto a ser una niña. A mis abuelos no los veo nun-


ca y la chica que cuida a mi madre es joven.


De todas maneras, una cosa es segura, nin-


gún viejo habría podido despertar jamás mi imagi-


nación. Ninguno salvo la señora de abajo y el señor


de arriba. Y ahora ya no veo la vejez como la oscuri-


dad, sino como un destello de luz, tal vez el último.

AliceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora