Sweet Blasphemy (Ashley Purdy FANFIC)

Capítulo 22. ¡Flamin Hot!

Era muy de madrugada. Jessica se fue a dormir con los chicos, y Ashley se quedó conmigo.

-Tuck... Tuck... -Me despertaron unos susurros.

-¿Hmm?

-Ven... Te necesito. -Levanté la mirada, era Jessica.

-¿Qué quieres? -Pregunté molesta.

-Ven, sal. No despiertes a Ashley.

Me levanté poco a poco y salí de la tienda.

-¿Qué pasó?

-Mira. -Me señaló una... ¿Víbora?

-Ay, Dios mío. -Exalté.

-Shh... No hagas ruido, maldita sea. Es una cincuate; no hace nada.

-En ese caso, ayúdame a agarrarla y llevarla lejos. -La iba a tomar pero me jaló.

-La vamos a llevar pero ahí. -Señaló la carpa de Juliet, Ella y Alice.

-¿Qué?

-Sí, pero, espera que salga Alice. Ella nos ayudará.

Segundos después salió. Nos sonrió de oreja a oreja y vio la víbora sorprendida.

-Perfecto. -Dijo sonriente. -Están perdidamente dormidas, aprovechen.

-Tuck, ayúdame.

-Jessica... No sé, no quiero.

-Ay, ya. Es hora de vengarte de todo lo que te han hecho.

-Pero...

-Oye, es una pequeña broma. -Me dijo Alice.

-Está bien. -Suspiré y ayudé a tomar el animal con Jessica.

Alice nos abrió la casa de campaña y nosotras la depositamos dentro de ésta.
Cuando la dejamos, Alice se fue a esconder, Jessica se metió con los chicos y yo con Ashley.

Me recosté al lado de él y traté de conciliar el sueño, pero el grito agudo de alguien me lo impidió. Fue Juliet o Ella.
Ashley se levantó asustado y me preguntó si estaba bien, a lo que yo asentí.
Abrimos un poco la tienda y nos asomamos. Juliet salió corriendo de ahí y segundos después, Ella.

Fue inevitable no reír. Volteé a ver a Jessica y a los demás, también reían.
Después llegó Alice preguntando que había pasado, y diciendo que ella había ido a respirar aire fresco.

Ashley me metió de nuevo a la tienda y la cerró.

-A ver. Elizabeth Tuck. ¿Me puedes decir qué fue eso?

-¿Qué fue qué? -Fingía demencia.

-¿Por qué le hicieron eso a ésas pobres?

-Pero yo no fui, lo juro por Dios. -Rayos. ¡Pecado!

-Vaya, vaya. Mandamientos dos y ocho, destrozados. -Sonrió victorioso.

Sonreí de lado y él se acercó a mí.

-Bien hecho. -Rió y besó mi frente.

[...]

Después de estos cortos días en el lago, vamos de regreso.
Me recosté en el hombro de Ashley y traté de dormir un poco, ya que no pude dormir después de lo de Juliet y Ella.
Al final Jake tuvo que sacar al animal, pero ellas ya no quisieron dormir ahí, así que se pasaron con nosotros.

-Llegamos. -Dijo C.C.

Abrí mis ojos, sí, habíamos llegado. Bajé del auto junto con Ashley y saqué mi equipaje.