(Narra Scarlet)
Un sonidito me despierta, me levanto aún somnolienta y buscó a mi alrededor de dónde proviene ese infernal sonido.
El celular.
Mi celular.
La pantalla se ilumina y veo que es mi mamá.
- Hola mamá - le contestó mientras me desperezo lentamente
- ¿Porque no contestas?- me dice, su voz se escucha preocupada y ligeramente molesta.
-¡Oh estaba dormida!-
- Hmm ¿Cómo estás?-
- Bien, mis clases son geniales.- le comentó
- ¿Segura?-
- Sí mamá, no te preocupes.-
Pero lo cierto era que deseaba con todas mis ansias poder decirle a mi mamá todo lo que me ocurría, tan sólo en una semana me habían ocurrido muchas cosas.- Sabes ¿que tu voz se escucha con angustia? - me dice, y casi puedo ver cómo enarca una ceja y tuerce la boca.
- Claro que no mamá, comienzas a imaginar cosas- trate de disimularlo con una risa.
Aunque, sin esperarlo comencé a contarle a mi mamá sobre Alexander y Haidren.- Mamá en esta escuela existe un niño tan poco conocido que pasa desapercibido, he intentado preguntarle a todos sobre él, pero parece que no existe -
- Pues . . . quizás sólo no le gusta hablar con los demás, o en su defecto es igual de cortante que tú mi amor.-
Escuche la risa de mi mamá por el otro lado del teléfono, la verdad necesitaba escuchar esas risitas suyas tan particulares.
- ¿Qué tal tus compañeros de clase, son buenos contigo?. -
- No me quejo, pero tampoco son wow; aunque existe un chico llamado Haidren que me comienza a hartar. -
Sin saber más mi mamá comenzó con su charla de resolución de problemas amorosos.
Lo que me sacó de mi platica con mi mamá fue el ruido que hizo la puerta alguien quería entrar a mi habitación y lo único que vi fue alguien alto con el cabello café.Al instante me levanté y empuje la puerta tan fuerte como pude, ¿Quien demonios querrá entrar?
Estuve como unos cinco minutos esperando, arrancando la puerta con mi cuerpo para que la persona o la sombra pudiera entrar.
Me quedé pensando en lo que mi mamá me había dicho, al poco rato deje de recargarme en la puerta y volvi a la cama, me recosté, me siento cansada, quizá un rato mas de sueño no estaría mal.... un rato más, todavía es bastante temprano necesito dormir más, me acurruqué y volví a sumirme en el sueño.
Me sumergí en un estupor tan denso, no podía ver nada, me sentía ligera como si fuera vapor pero en realidad era niebla. Estaba en medio de la neblina, sentí una fina lluvia caer sobre mí y a cada paso que daba me sentía pesada, la ligereza se había ido.
Sentía mi ropa pesada y ese peso me hundía, a cada paso que daba, debo salir de aquí.
Me ahogare.
Mi corazón se acelera, no puedo ver nada, mi respiración se agita.
A lo lejos ve un árbol, pareciese que fuera una persona con los brazos abiertos invitándome a la paz, debo de ir hacia el.
Camino con dificultad es como si algo me sostuviera los tobillos, miro mis pies y unas manos largas y pálidas agarran mis tobillos, es real, siento la presión, el dolor, tiene clavadas las uñas y no puedo caminar, me caeré.Gotas rojas brillante se vuelven al piso y caen por mi piel y cuando más me muevo más me hunde las uñas en mis tobillos.
No.
No, suéltame.
Intento gritar pero el sonido se queda atascado en mi garganta.
Me ahogo, pero no sé de dónde sacó la fuerza de voluntad y con dificultad y dolor comienzo avanzar lentamente, no puedo dejar de avanzar, no quiero voltear, siento mi pierna desgarrada.
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Love Sick
Romance¿Alguna vez te has enamorado? ¿Alguna vez te has enamorado a tal grado de estar dispuesto a dar todo? ¿Alguna vez has temido encontrar ese sentimiento? Bueno, esta es mi historia, quizá no sea del gusto de todos, sí cometí errores pero al final creo...