Secret Love (Kaisoo-HunHan)

Holaaa:'3

Ambos niños se encontraban jugando a la pelota en un solitario parque, uno de ellos era delgado, su piel era blanca como la nieve, cabello oscuro, grandes ojos y labios gruesos en forma de corazón, el otro pequeño también era delgado, pero su piel era ligeramente más bronceada, cabello oscuro y labios gruesos.

-Kyungsoo, ¿vendrás a mi fiesta de cumpleaños verdad?-. dijo el de piel bronceada lanzado la pelota con el pie en dirección al contrario.

-Seré el primero en llegar Jongin, no lo dudes-. Jongin sonrió alegre y Kyungsoo le patea la pelota pero falla y rueda fuera del parque.

-Eres muy chueco primo-. Jongin fue a buscar la pelota y escuchó la voz de su madre ordenandoles que entraran a casa pues ya era la hora de cenar.

-¡A que no me ganas Kyung!-. Jongin tomó la pelota entre sus manos y corrió hasta la entrada de su casa seguido por su primo.

-Eres muy tramposo Jongin, estabas mucho más cerca que yo-. Los dos comenzaron a empujarse en medio de risas.

-Chicos vayan a darse un baño por favor-. Les dijo la madre de Jongin con una sonrisa-.

-Ahora te gano "Ni-Ni"-. Kyungsoo recalcó esas palabras mientras subía corriendo las escaleras con una sonrisa de oreja a oreja.

-¡Hey! No me llames asi enano-. Corrió tras él, subiendo de dos en dos las escaleras.

La madre de Jongin sonrió encanta de verlos tan felices jugando pero su sonrisa se borró al recordar el motivo de aquella cena, se dio media vuelta y comenzó a masajearse las sienes.

-¿Qué pasa amor?-. Su esposo se acercó con un mantel en sus manos frunciendo el ceño al ver a su mujer tan desanimada.

-Ves como se llevan esos dos-. Dijo señalando la escalera, se acercó a su esposo negando con la cabeza.

-Sungwoo no tenemos otra alternativa, es una buena oportunidad para los tres, me han ofrecido un buen puesto en aquella empresa, tu podrás abrir aquel salón de belleza que siempre has soñado e inscribiremos a Jongin en un buen colegio y cumplir sus sueños-. Al señor Kim le brillaron los ojos al decir aquellas palabras. Puso el mantel en su hombro izquierdo para luego posar sus manos en los hombros de su amada-. Jongin es un niño increible, sé que no le costara adaptarse-.

-¿Y qué hay de Kyungsoo?-. Lo miró a mis ojos-. Mi hermana me ha mencionado varias veces que mi sobrino no es muy sociable y lo he notado Jongsuk, Kyungsoo solo se siente cómodo cuando esta con nuestro hijo-.

-Sungwoo no pod...-.Fue interrumpido por el sonido del timbre, la señora Kim suspiró sonoramente y camino hacia la entrada, abrió la puerta y se encontro con su queridisima hermana y su cuñado.

-¡Hola!-. Saludó la madre de Kyungsoo y se acerco para darle un apretado abrazo. Después de intercambiar saludos pasaron al comedor a sentarse.

-¿Y los chicos?-. Preguntó el padre de Kyungsoo mirando por todos lados buscando a su hijo.

-Están arriban Kyungdae, ya los busco, por favor tomen asiento-. La señora Kim les sonrió mientras se encaminaba a las escaleras.

-No te quiero preocupar Kyungdae pero, ¿Qué pasará con Kyungsoo?-. Cuestionó el padre de Jongin mientras servia los platos.

-No lo sé Jongsuk, pero tendrá que aceptarlo, no estará siempre pegado a Jongin como si fuera su sombra, ¿no?-. Su esposa lo miró fijamente entrecerrando los ojos.

Se escucharon risas y muchas pisoteadas bajando la escalera.

-¡Kyungsoo aun tiene champú en los oídos mamá!-. Jongin reía estrepitosamente mientras que Kyungsoo lo miraba serio.

-¡Todos a la mesa!-. Dijo con una sonrisa el señor Kim. Todos tomaron asientos, Jongsuk encabezaba la mesa, a un costado estaban el señor y la señora Do, al otro costado estaban Kyungsoo y Jongin peleando con sus tenedores y al otro extremo estaba la señora Kim. Todos comían la deliciosa lazaña que habia preparado el señor Kim, disfrutaban de una deliciosa cena en familia mientras veían a Jongin y Kyungsoo peleando con sus tenedores como si fueran espadas. Los adultos ahi presentes se miraban entre si porque todos sabian la razón de esa cena familiar.

-Y bien Kyungsoo, ¿Cómo te portaste este fin de semana en casa de sus tíos?-. Kyungsoo paró la lucha de metales y se sentó derecho.

-Bien, la tía cocina muy rico-. Comenzó a comer y Jongin le pateo la pierna, Kyungsoo le devolvió la patada y asi empezaron a pelear debajo de la mesa.

-Muy bien, a todos los aqui presentes-El señor Kim pusó los codos sobre la mesa y recargó su mentón sobre sus manos entrelazadas, todos silenciaron y lo único que se escuchaba eran las risitas de los únicos niños de esa mesa, la señora Do los hizo callar a ambos con un "shhh". Y ambos callaron el resto de aquella velada.

-Nos mudaremos a Francia-. Todos comenzarón a felicitarlos, dándose abrazos, toda una actuación, todos menos Kyungsoo quien se habia pegado a su asiento mirando un punto fijo en la mesa.

La cena habia concluido asi, Kyungsoo tomó todas sus cosas y se despidió de sus tíos y de Jongin mirandolo fijamente, salió de casa y subió al auto de sus padres. Llegaron a casa y Kyungsoo subió rápidamente a su habitación, se quitó los zapatos y se acostó tapandose hasta la cabeza.

-¿Kyungnie?-. Su madre abrió la puerta y camino a sentarse a la orilla de la cama de su hijo.

-¿Y el cumpleaños de Jongin mami?-. Se destapó y se sentó mirando a su mamá, ella observo la triste mirada de su hijo y lo sentó en su regazo.

- Mira Kyungsoo, tus tíos y Jongin se irán pasado mañana y celebrarán el cumpleaños de Jongin allá, verás, a tu tío Jongsuk lo han contratado en una importante empresa pero lo único malo es que es en el extranjero pero no significa que no los volveremos a ver, podemos invitar a Jongin para las vacaciones de verano-. Acarició el rostro de Kyungsoo y su hijo la miró con una sonrisa.

-¿Podemos ir a despedirnos?-. Preguntó Kyungsoo con brillo en los ojos.

-Por supuesto que si cariño-. Besó la cabeza de Kyungsoo y lo acostó para desearle las buenas noches y salir de la habitación.

El dia habia llegado y Kyungsoo estaba cargando una linda pelota junto a sus papás esperando fuera de la casa de sus tíos, abrieron la puerta y todo paso tan lento para Kyungsoo, mientras sus padres se despedian deseandose lo mejor, él y Jongin no habian intercambiado palabras solo se miraban fijo.

- Quiero que te la quedes-. Le tendió la pelota y Jongin dudó un segundo en aceptar el regalo pero luego tomó la pelota en sus manos.

-Todo esto es tan inesperado primo, espero nos volvamos a ver-. Y ambos sonrieron.

Lo ultimo que recuerda Kyungsoo es a Jongin parado con una mano despidiendose y con la otra sosteniendo la pelota sin dejar de sonreír.

>< Bueno es el primer fics que escribo y creo que se notaráXD.
Esta historia será mas de sentimental que lujuriosa, tendrá muchos personajes y eso, planeó hacerla bien extensa:o
Tengo muchas ideas que ire ordenando, espero les guste, bye❤