Secret Love (Kaisoo-HunHan)

Capitulo 5

La mañana siguiente Kyungsoo despertó con mucha fiebre, su cuerpo sudaba a chorros y sentia que su cabeza iba a explotar, se quitó las sabanas de encima y se sentó sobre su cama llevandose ambas manos a su cabeza tratando inutilmente evitar el dolor pero solo logró que la presión aumentara. Se levantó de mal humor y salió de su habitación para dirigirse a la cocina y preparar un zumo de naranja, su cuerpo comenzó a temblar y dejo el vaso sobre la mesa antes de que cayera al suelo.

—¿Kyungsoo?, ¿estas bién?— Su primo Jongin, quien había visto todo desde el umbral de la cocina se acercó a Kyungsoo y puso sus dedos sobre la frente del más bajo, le sonrió de burlón  cruzándose de brazos—Estas enfermo, ¿quieres que te acompañe al hospital enano?.

- No me llames asi-. Golpeó el hombro del moreno, le dió una breve mirada a la ropa de dormir que estaba usando Jongin, unos pantalones sueltos y una camiseta de mangas largas ceñida a su torso y brazos, tenía que admitir que su primo se veia bastante guapo hasta cuando se despertaba mientras que él usaba un pijama de polar con algunas nubes de diseño. Quitó esos pensamientos de su cabeza rápidamente cuando Jongin noto que lo estaba mirando fijo.

- Será mejor que prepare el desayuno-. Kyungsoo dió media vuelta para poner a hervir el agua cuando escuchó una enorme carcajada proveniente de una voz femenina.

-¿Do Kyungsoo preparando el desayuno?, es que mis ojos no lo pueden creer, hijo tú los sabados apenas te levantas para ir al baño-. La señora Do habia entrado a la cocina y comenzó a poner las tazas, platos y servicios de forma rápida y eficaz, Kyungsoo solo se encogió de hombros y caminó hacia el living después de tomar su vaso con jugo.

-En la tarde vendrá Luhan mamá-. Anunció sentado en el sillón grande.

-¿Quién es Luhan?-. Preguntó Jongin sentándose a su lado muy cerca de él, Kyungsoo se puso rígido de inmediato, no le gustaba mostrar tanto afecto hacia las personas, no le gustaba que lo abrazarán, besaran, etc y Jongin estaba ahi rozando su brazo.

-Es mi mejor amigo-. Respondió a secas antes de tomarse todo el jugo.

-Tranquilo, no te lo robaré-. Jongin notaba que su primo era cortante y distante, bueno por lo que él recordaba siempre fué asi con todos, menos con él, pero habian pasado ocho años y Jongin tendría que retomar nuevamente esa confianza con su primo aunque le costará, Jongin sabía que si primo no era muy empático, no reía mucho, Jongin podia apostar que ese tal Luhan era el único amigo de Kyungsoo y sentía celos, podría decirse que ese tal Luhan habia tomado su lugar, pero Jongin habia notado que su primo era así por momentos ya que la noche anterior cuando entro a su habitación notó que estaba muy nervioso y tartamudeaba al responderle.

Kyungsoo bufó y rodó los ojos. La señora Do los llamó avisandoles que el desayuno estaba listo, se levantaron y fueron hacia la cocina, se sentaron uno al frente del otro y la señora Do encabezando la mesa.

-¿y papá? -. Preguntó Kyungsoo llevándose la taza de café a la boca.

-Lo llamaron del trabajo y se fue temprano.

Los tres tomaron el desayuno en silencio sin decir nada. Kyungsoo y Jongin se miraban de reojo de vez en cuando y la señora Do lo notaba ocultando una sonrisilla. Cuando terminaron Kyungsoo subió a su habitación y Jongin ayudo a su tía a lavar y ordenar todo.

Kyungsoo ordenó su habitación y buscó algo de ropa para cambiarse, después de tomar un baño se puso un jeans, una polera azul y zapatillas. Se quedó en su habitación sentado encima de la cama intentando leer un libro sin poder concentrarse puesto que su cabeza era un lío de muchos recuerdos. Después de que Jongin y sus padres se fueran a Francia, Kyungsoo no queria ir a la escuela, a Kyungsoo siempre lo molestaban por su baja estatura y porque no se juntaba con nadie, él solo hablaba con Jongin quien lo defendía siempre, en algunas ocasiones Kyungsoo se quedaba en su salón de clases y miraba por la ventana como Jongin jugaba con sus compañeros a la pelota, Jongin le sonreía y le hacia señas para que fuera con él pero Kyungsoo se negaba. Desde que se fue Jongin él se quedaba en el salón de clases terminando alguna tarea o pintando, hasta que llegó Luhan dos años más tarde, ese niño de cabellos de oro y piel blanca se sentó a su lado con una enorme sonrisa en el rostro se quedaba en los recreos con él, compartían la colación y jugaba juegos de mesas. Kyungsoo pensaba que en cualquier momento Luhan se aburriría y saldría a jugar al patio como los demas niños, pero nunca lo dejó solo, siempre eran ellos dos, en las actividades de grupos sólo eran ellos dos. Luhan desde que conoció la extraña personalidad de Kyungsoo se habia preguntado por qué era así, también nunca se atrevió a preguntarle, pensaba que Kyungsoo se sentiría mal y podría dejar de hablarle, pero siempre mantuvo esa duda y la esperanza de que algún día Kyungsoo le dijera la verdad.