Secret Love (Kaisoo-HunHan)

Capitulo 1.

Ocho años después.

—Kyungsoo tienes que levantarte, vas a llegar tarde—. Abrió la puerta de la habitación y comenzó correr las cortinas dejando que la fuerte luz del sol le golpeara la cara.

—Mamá cada vez que haces eso de golpe siento que quedaré ciego —. Salió de la cama y se encerró en el baño.

—No seas exagerado Kyungsoo, ire a preparar el desayuno—. Cogió la ropa sucia y salió de la habitación.

Luego de unos minutos Kyungsoo salió del baño y empezó a ponerse su uniforme, por último arregló su corbata, tomó su mochila y bajó a la cocina, observó a su mamá preparando lo que llevaría de desayuno.

— He preparado un delicioso sandwitch de queso y jamón para que lleves mi bebé—. Kyungsoo rodó los ojos, no le gustaba que su mamá lo tratará como si fuera un niño de cinco años, tomó la bolsa y la echó en su mochila.

—Gracias mamá —. Se acercó para besar su mejilla pero ella lo tomo entre sus brazos y lo abrazó con fuerza y comenzó a besar su cara por todas partes.

—Mi Kyungnie, aún no puedo creer que este año terminas la preparatoria, está tan grande mi bebé—. Lo abrazó más fuerte.

—¡Mamá suéltame, llegaré tarde!—. Kyungsoo comenzó a mover su cuerpo tratando de zafarse del agarre, su mamá aflojó el apretado abrazo y aprovechó de ordenar el uniforme de su hijo y su cabello.

— Que te vaya bien cariño—. Besó su frente y Kyungsoo se despidió con la mano y salió lo mas rapido de su casa antes de que su madre comenzará a soltar lágrimas.

Llegó hasta la parada del autobús y se sentó con las menos metidas en los bolsillos de su pantalón.

—¡Heeeeeeeey! ¿Por qué esa cara?—. Alzó el rostro y vio a su amigo parado justo enfrente de él como todos los dias.

—Nada—. Respondió a secas el más bajo.

—Ay vamos Kyungsoo, sea lo que sea tienes que estar feliz, ¡Hoy es viernes!—. Tras decir lo último su amigo comenzó a dar saltitos en su lugar, Kyungsoo miró hacia todos lados asegurándose de que nadie los estuviera viendo.

— Luhan calmate, mira viene el autobús —. El mencionado le sacó la lengua y tiro de su mano subiendo juntos al autobús, tomaron asientos, Luhan a la ventana obvio.

— Hoy mamá se puso más sentimental que nunca porque este es nuestro último año—. Dijo Kyungsoo enojado.

—¿Y por eso estas así?—. Lo miró Luhan con el ceño fruncido.

—Estoy harto de que siempre me trate como un puto bebé y lo sabes—.

— Es que Kyungnie eres tan adorable que sinceramente no aparentas diecisiete años—. Lo único que recibió de respuesta fue un codazo de parte de Kyungsoo.

El autobús se detuvo frente a la preparatoria y todos bajaron. Kyungsoo y Luhan bajaron de los últimos porque, como siempre, Luhan tenia que arreglar su delicada cabellera rubia.

— Vamos a llegar tarde por Dios—. Kyungsoo lo tomó del brazo y comenzó a caminar rapidamente hasta la entrada de la prepa.

—Kyungsoo sabes que no me puedo ver mal enfrente de él—. Dijo Luhan mirando a todos lados buscando a alguién.

— ¿Y cuándo le vas a hablar?—. Miró a Luhan y rodó los ojos al verlo tan desesperado.

—Jamás lo har... Mierda, Kyungsoo, Kyungsoo, kyungsoo—. Comenzó a mover el brazo del más bajo rapidamente sin despegar la vista de la persona que acababa de salir del baño de varones—. Parece un puto modelo, Kyung—.

Kyungsoo miró a Luhan y pudo jurar que sus ojos fueron reemplazados por dos grandes corazones, luego miró a la persona que a la cual Luhan observaba, rodó los ojos, no podria ser otra persona. Un chico bastante alto y delgado, del piel clara, mandíbula definida, llevaba su uniforme desaliñado, camisa abierta en la parte del cuello, corbata suelta, pantalón ajustado, su mochila colgando de un hombro y por supuesto lentes de sol, no podia ser otra persona.
Sonó la campana y todos los alumnos que se encontraban en aquel pasillo comenzaron a caminar hacia sus salones. Kyungsoo volvió a mirar a Luhan y este se estaba mordiendo el labio sin apartar la mirada de su modelo.

—Que vergüenza Luhan, ¿Te compro un babero?, mejor vamos a clases —. Jaló su brazo y lo arrastró al salon, ninguno de los dijo nada mas hasta que tomaron asiento.

—Ahhhhh...—. Luhan suspiró sonoramente mientras dejaba su mochila encima de la mesa—. Nunca corresponderá mi amor Kyungsoo, nunca, Sehun no se mete con personas como yo—.
Kyungsoo imitó la acción de su amigo, puso su mochila encima de la mesa y saco el sandwich que le hizo su mamá.

—¿Y?, algún dia tendrás que hablarle, como sabes pueden ser buenos amigos—. Kyungsoo abrió su mochila nuevamente para sacar su cuaderno y vio que su sandwich estaba partido por la mitad y a Luhan devorando esa mitad con la boca llena.

— Lo siento, igual me ibas a dar—. Kyungsoo rodó los ojos y comenzó a comer su sandwich antes de que entrará el profesor.

La mañana habia pasado rápido y Kyungsoo recuperó el buen humor de siempre. Iban caminado hacia los camarones a cambiarse el uniforme por ropa deportiva ya que a la última hora les tocaba gimnasia, cuando Luhan sintió que le pasaban a rozar el hombro, el rubio miró hacia la dirección de aquella persona y su corazón se detuvo cuando divisó a Sehun unos pasos más adelante que ellos, abrió sus ojos y su boca quedo en una perfecta "O", paró de caminar mientras se tocaba el pecho.

—¿Viste eso Kyungsoo?—. Dijo en un susurro.

—¿Qué cosa?—. Preguntó el más bajo tambien deteniéndose y alzó ambas cejas.

— S-su brazo tocó mi brazo, su piel toco mi piel—. Kyungsoo se volteo mirando a todas partes para saber de quien hablaba su amigo, aunque ya tenía una idea, pudo ver a Sehun de espaldas caminando relajado mucho más adelante que ellos. Sonrió y paso su brazo por los hombros de su amigo de cabellos claros.

—Realmente no se que le encuentras—. Dijo Kyungsoo cuando llegaron al camarín. Comenzaron a cambiarse ropa y Kyungsoo terminó primero que Luhan ya que este apenas se habia cambiado la polera.

— Todo, todo de él me gusta—. Le respondió poniéndose un pantalón gris que le quedaba un poco suelto.

—Esta bien, pero qué pasa si cuando le conozcas bien no te gusta su personalidad-—. Cuestionó nuevamente Kyungsoo guardando sus cosas dentro de su mochila. Luhan no respondió, terminó de cambiarse, guardó sus cosas y ambos salieron del camarín en dirección al gimnasio. Kyungsoo noto el repentino cambio de humor de Luhan asique le golpeo el hombro ligeramente.

—Tu no lo entiendes porque no eres como yo —. Dijo Luhan mirandolo.

—Lo sé pero es desde que llegó Sehun que te ha gustado y eso fue hace tres años y aun no te acercas hablarle—.

—Algun día lo haré, cuando esté bien borracho—. Ambos comenzaron a reír estrepitosamente—¿Una carrera hasta el gimnasio?—. Propuso Luhan con una mirada llena de malicia pues siempre le ganaba a Kyungsoo y este se echo a correr antes de responderle.

— ¡Oye tramposo!—. Luhan comenzó a correr tratando de alcanzarlo pero Kyungsoo iba llegando al final del pasillo.

—¡Ahora te gano rubia!—. Le gritó riendo.

—¡No me llames asi enano!—.

Y Kyungsoo se detuvo en seco.

Recordó a su primo Jongin.