Simple Ways (RariJack EG)

Confrontación

-¿Es esto una especie de broma? -tartamudeó Rarity. La inseguridad había hecho que se olvidara del falso acento que había estado utilizando.

-¿Por qué, Rarity? -para ella, dejar de utilizar su acento era mucho más complicado, pero sentía que lo estaba haciendo bien- ¿Qué cosa puede hacerte creer que esto es una broma?

-Porque tú nunca te pondrías un conjunto así -parecía que podría hiperventilarse en cualquier momento. Rarity estaba realmente desesperada-. A ti te gusta arar campos y... cargar manzanas.

-¿Y no me puede gustar la moda al mismo nivel? -Rarity estaba a su alcance, pues la rubia estaba justo al borde de la pasarela. Alzó una mano, pensando en alcanzar la mejilla de su muñequita, pero se arrepintió al instante. En vez de acariciar ese suave rostro, empujó el sombrero hacia él, interrumpiendo la conexión en sus miradas. Cuando Rarity levantó la mirada, incrédula, Applejewel miraba descaradamente sus arregladas y brillantes uñas.

-¡Pero no te gusta! -exclamó, desesperada. Ésta conversación le estaba resultando bastante familiar, pero no dejó que eso afectara en lo más mínimo a su actuación.

Applejack vio una oportunidad. Y la tomó.

-Pues en realidad no me conoces tan bien como crees -dijo, mirando hacia otro lado con desdén. Rarity no le quitaba la mirada de encima. Tardó unos pocos segundos en cambiar su expresión de incredulidad a ser una mirada decidida y molesta.

-Bien -dijo, recuperando el acento campirano que tanto le molestaba a Applejack-, pero tengo que planear todo un festival -apartó la mirada-, así que si vas a empezar a modelar, ¡sólo sigue con esto!

Applejack sonrió. Para esto se había preparado tanto.

-La vida es un festival -empezó a recitar el discurso que había repetido tantas veces antes; se sentía segura de sí misma, aunque aún no se acostumbraba al sonido de su voz-, y deben celebrarlo luciendo como yo, porque soy una vanguardista que impone tendencias -con gesto de modestia, apartó el flequillo sobre su frente, aunque éste regresara a su lugar inmediatamente. Acto seguido posó para su "público" y miró con satisfacción a Rarity, quien había quedado boquiabierta.

-¿Tú? -exclamó, entre ofendida, disgustada e incrédula. Rarity empezó a parlotear con su tono de voz habitual- ¿Una vanguardista que impone tendencias? ¡Por favor! Eso es lo más ridículo que has llegado a... Es decir -se interrumpió al darse cuenta que había salido de su papel. Se aclaró la garganta y empezó de nuevo, esta vez, actuando como lo había estado haciendo- ¡Te felicito! A mí, por otro lado, no me interesa nada mi aspecto -dijo en tono de burla, y se rascó la enmarañada melena púrpura- mientras logre terminar las labores.

Al terminar su pequeño discurso, Rarity presionó la punta de su propia nariz con dos dedos, haciendo burla de la nariz respingada y pequeña de Applejack.

-Oh, ¿es en serio? –replicó Applejack, retándola. Ahora estaba muy molesta, pero se obligó a sonreír con malicia y seguir con su actuación.

-Sí, exactamente

-Yo no –dijo suavemente. En ese momento sintió entre los pliegues de su vestido el espejo de mano de Twilight, y le agradeció desde el fondo de su corazón-. Mi cabello debe estar perfectamente bien arreglado a toda hora –dijo mientras verificaba en el espejo que su peinado siguiera intacto. Vio por el rabillo del ojo a Rarity quitándose el sombrero de paja.

-Pues mi cabello está lleno de polvo y puntas maltratadas –Applejack se preguntó cómo alguien podía maltratar tanto su cabello en dos días, pues en verdad se veía horrible. Se tragó el impulso de soltar una exclamación al respecto.