Primero te mato

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No hay manera de explicar la rabia que siento al oír a mi padre llamar hija a esa perra, aunque su mama no me cae mal, de hecho Frida es encantadora y se parece un poco a mi madre piel güera, cabello castaño rojizo, ojos color avellana y labios que aunque este seria parece que esbozan una sonrisa tranquila, como de paz.

Aunque si de eso se trata, ahora en tiendo porque mi papa se caso con ella, quizá para tener su recuerdo vivo, y es muy razonable ya que parece que mi mama nunca se fue, Frida llena de vida la casa igual que lo hacia ella.

Lo único bueno es que los cuartos tienen baño y solo tengo que ver a la insoportable de Devany cuando es hora de comer y aveces salgo del cuarto para ir a la sala y convivir con mi papa y Frida que insiste en que le diga mama, pero aun no esto lista para eso.

Devany sabe que me gusta leer libros, y eso causa en ella espasmos de coraje, que causa en mi mucha satisfacción, aunque aveces lo usa en mi contra, pero el eco en su cabeza logra tranquilizarme.

Me gusta cuando agacha la cabeza y me pide ayuda con un dibujo, ella incluso lo admite, que se me da muy bien, que podría vivir vendiendo cuadros y que nunca pasaría hambre, y aun que me dan ganas de cerrarle la puerta en la cara, en mi naturaleza no esta la maldad, tanto como en ella.

Cuando Frida y mi papa nos obligan a convivir, no e podido pasar por alto que ella se queda mirándome cunado hablo con las personas, supongo que es porque nunca se acercan a hablar con ella, aun que si quitara esa cara de fresa y superioridad se acercarían a hablarle, pero me mantengo al margen de contestar sus preguntitas estúpidas enfrente de la clase para intentar ridiculizarme.

-¿Oye Mabeel, ya terminaste ese fascinante libro tuyo? -Dijo enfatizando su tono burlón en la segunda ''a'' de fascinante-

-Si, Devany porque, ¿es que acaso te interesa meter algo en tu cabesita hueca? -respondo con el mismo tono burlón de ella para devolverle el favor-

Logro callarla, aprieta los labios como suele hacerlo cada que le da coraje algo, se da la media vuelta y se va contoneando las caderas para que su casi inexistente falda se levante y se vean sus bragas, como es de esperase todos los chicos se quedan mirando, deseando algún día podersela llevar a la cama, claro que no es un secreto que sus quince años devora esta mas usada que un sanitario publico, aun no entiendo como es que Frida no se da cuenta que lleva una falda y aparte lleva su falda de ramera.

Termina y día y algún volvemos a casa, hoy es miércoles y eso me gusta porque Frida prepara un delicioso pastel para la merienda, lo que le da puntos a su favor.

-Hola niñas -dice mientras nos da un beso en la frente- ¿como les fue?

-Bien -digo, pero omito que Devany lleva su putifalda bajo la falda larga que trae ahora- Devany trae un recadito para ti -volteo a ver a Devany y veo como su piel blanca se sonroja al darse cuenta de que la e delatado sin previo aviso-

-¿Que?, ¡claro que no Mabeel miente! -responde pero sus ojos casi se salen, levanta la voz y su cara se pune roja, lo que meda demasiada risa-

-¿Y si miento porque estas tan roja y alterada? -respondo con tono sarcástico- ¿oh...es que incluso yo se mas sobre ti que tu misma?

-Devany, dame ese recado -me impresiona la seriedad que Frisa es capas de expresar-

-¿Mamá, le vas a creer mas a esta rata que ami? -dice señalándome y se exactamente que rata es mas un sinónimo de ratón de biblioteca, que la verdad no me molesta- !no puede ser posible mama por favor!

-Devany no te lo voy a pedir otra vez, dámelo -Frida esta alterada y le grita a Devora esto es realmente algo nuevo porque ella es muy tranquila- o te voy a voltear de cabeza para encontrarlo yo misma.

Devany agacha la cabeza tratando de evadir la mirada de asecina de Frida y aun no dice nada, llevamos veinte minutos paradas en la entrada y Frida no me deja irme, esto se torna incomodo, aun que tengo que esforzarme para no empezar a burlarme de Devany, pero despues de un rato me gana y suelto una pequeña risita.

-¡Te da gracia verdad!, ¿robarte el cariño de mi mama te hace feliz maldita huérfana?

Si...las palabras lastiman y el que me dijera huérfana me atravesó el alma como si fuera una maldita bala atravesando un cristal, perdí él control, la sangre se hizo agua y el agua fluyo por mis venas, los impulsos corrieron dejando inhabilitado mi razonamiento y antes de darme cuenta le había hecho sangrar la nariz.

-Oh...que buen golpe -dice Devany limpiándose la sangre de la nariz y la boca- pero, ¿que pasaría si yo me robo el amor de tu papa, eh?

-¡Primero te mato y luego me deshago de cualquier rastro de tu existencia en la tierra! -respondo casi gritándoselo en la cara- créeme que te tengo tanta lastima que aveces me parece que te haría un favor si te matara -me callo cinco segundos que sirven para tranquilizarme un poco apartarme de mi orgullo y dejar que las lagrimas rueden- eres una maldita perra y créeme que te deseo que ojala nunca pierdas a tu mama.

Siempre EllaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora