Mira a traves de mis ojos

Revelación...

A pesar de que estuve un tiempo dormido y pensando en él divorcio de mis padres, nada lograba importarme tanto como mi mejor amigo, Max estaba pasando por un mal momento, tenía que investigar que pasaba y porque un chico tan alegre y loco como él tendría esos problemas. Lo que nunca pensé es que para llegar al borde de la locura tenías que vivir un horror.

Ya era domingo, día del juicio final. Son las 4 de la mañana y es la hora perfecta para salir de la casa y empezar a investigar sobre Max. Él nos espera a las 12 así que tendré que evitar absoluto contacto visual, sería bueno hablar con la madre o padre, ellos podrían decirme las respuestas que busco para entender o saber si hay algún "¿porqué?" así que intentare averiguar algo.

Llegué a su casa y vi una mujer, de piel blanca como la leche, pelo lacio obscuro, muy delgada y de unos 30, supe que debería ser la madre así que me acerque directamente sin voltear
- Señora disculpe me pero (dije tímidamente) soy amigo de Max y quería hacerle un comentario u preguntarles ciertas cosas.
- Ya veo niño, dime (saco un cigarro de sus bolsillos)
- Quería saber si usted entendería porque Max quisiera quitarse la vida (intente aguantar el llanto) siento que podría ayudarlo pero no se le pase, ¡intento matarse!
- Si la tiene... Sube al carro.

Su carro era una camioneta "Lincon" negra con vidrios polarizados, pensé que podría secuestrar me pero obviamente no lo haría, accedí a subirme con ella.

- Okay, mira esto y que ves
- Max tiene un hermano gemelo...

Sacó una foto, salía Max con alguien idéntico a él, se veían muy alegres los dos.

- No te conozco, pero para que hayas visto a Max así significa que haz venido más de una vez aquí, así que te lo diré ya tu sabrás que harás con la información (le comenzaron a lagrimear los ojos) hace unos meses Marth
- ¿ Quién es Marth ? (Pregunte anonadado)
- Es el hermano gemelo de Max, ellos quisieron ir al tejado a bajar un platillo, Max no quería ir con él por miedo así que Marth salió por la ventana y al agacharse por él platillo una teja se rompió y él cayo del segundo piso... Se rompió él cuello, Max se culpa por eso.

- No esperaba escuchar algo así señora
- Dime Sharon niño.
- Esta bien Sharon (lo dije con pena)
- Bueno, la verdad ¿solo para eso viniste tan temprano?
- Si, quería saber que pasa por su cabeza pero sigo sin comprender.
- Ocupas vivir algo que se asemeje a eso, no creo y espero que no te pase.
- Bueno Sharon, gracias por su tiempo y disculpe las molestias.
- No te disculpes, fue algo bueno el preocuparte por tu amigo y por cierto Max está arriba yo tengo que irme, cuidalo.
- Esta bien, iré enseguida.

Esa "charla" que tuvimos Sharon y yo, no sabría clasificarla y ni siquiera describir lo que sentí, pero lo que más me pesa es saber que no podré ayudar a mi amigo, esas experiencias nunca deberían ser vividas, no me imagino que me pasaría si algo le sucediera a Steve. Ahora lo que me queda es solo intentar que cada día para él sea un poco mas soportable.

Entre a su casa con cautela por si había alguien sin desear ser despertado, pase por la sala y había un señor de pelo castaño con barba de unos 4 días, la piel ligeramente bronceado con vestimenta muy formal. Estaba dormido, tenía una pestilencia de alcohólico profesional. Imaginé que debía ser él padre del Max, ya se me ocurre él "porque" Sharon tuvo que irse. Subí las escaleras lentamente pero entré más lento iba, hacía más ruido del que quería, llegué a la habitación de Max, no toque, solo abrí lentamente su puerta, estaba acostado así que termine de abrir la puerta y me acerque sigilosa mente, me acerqué a su cuello y comencé a recrear él sonido de Kayoko (la mujer de Ju-on: la maldición). Sus ojos se abrieron tanto que parecía como si se pudieran salir de sus cuencas al mismo tiempo que él brincaba como pez en charco. No logre contener la risa.

- JA JA JA! Te asuste (me faltaba él aliento)
- ¡Pero que demonios te sucede!
- Absolutamente nada, huy como te pones.
- ¡ Pues me cague idiota ! ¿Qué haces aquí tan temprano?
- Nada, andaba por él rumbo y aparte quería comentarte algo.
- No eres gay ¿ o si ?
- ¿Qué? Claro que no idiota, quería hablar sobre lo que habías planeado y la verdad pienso que no deberíamos hacerlo.
- ¿Hablas de tener sexo?
- A veces siento que lo dices enserio.
- Jajajaja... Opino lo mismo, pero la verdad ocupo hablar contigo (lo dijo entre cortado como aguantando algo).

Y ese día, él me contó todo lo que sentía y cuando le pregunte "¿Por qué quisiste hacer eso?"... Él solo me respondió "Yo solo quería volver con él".